Genial: "Apoyar a Israel no es desear muerte a los palestinos" (gracias, @JanaBeris1)

Por Ana Jerozolimski en Semanario Hebrero Jai.

El precio de España en el exterior por el sanchismo va a durar lustros (o decenios) de descrédito

España, tras el aislamiento al que se vio sometida durante la dictadura franquista, enfrentaba con la llegada de la democracia el difícil reto de convertirse en un socio fiable en la esfera internacional. Ese reto fue enfrentado por Adolfo Suárez, quien solicitó en 1977 la entrada de España en la Comunidad Económica Europea (que más tarde se convertiría en Unión Europea), solicitud que fue aprobada para que se iniciaran las negociaciones un año después.

El siguiente Presidente, Leopoldo Calvo-Sotelo, siguió en el camino de integrar a España dentro de la comunidad internacional a través de incorporar el país a la OTAN en 1982. A lo anterior se opuso el PSOE, que prometió que de llegar al poder haría un referéndum para sacar a España de la Alianza. Cuando los socialistas llegaron al gobierno, de la mano de Felipe González, se vieron obligados a cumplir la promesa de la consulta, pero fue para que España permaneciera en el grupo militar, algo que fue refrendado por los votantes en 1986. Antes de eso, en 1985, se había producido el ingreso de España en la Comunidad Económica Europea. La aceptación de España como un miembro fiable de la comunidad internacional occidental funcionaba bastante bien.

Y fue José María Aznar, con su llegada al poder en 1996, quien se propuso llevar a España a una situación aún más elevada, a través de convertirse en un socio preferencial en Europa de Estados Unidos, únicamente por detrás de Gran Bretaña. Eso lo consiguió con el apoyo diplomático de España a la invasión de Estados Unidos del Iraq de Saddam Hussein y la posterior participación, una vez terminada la guerra, del ejército español en la reconstrucción del país. España se colocaba en una posición envidiable por su cercanía a la única potencia mundial, Estados Unidos.

Pero todo eso cambió con la llegada a los mandos de España de Zapatero, en 2004, quien con su antiamericanismo e izquierdismo militante, que le llevó a la retirada unilateral y urgente del ejército de España de Iraq, se ganó la desconfianza de Estados Unidos en particular y los países occidentales en general. España destruía así todo lo conseguido con Suárez, Calvo-Sotelo, González y Aznar de un plumazo y pasaba de las alturas al suelo en política internacional.

Un suelo del que España no se levantó bajo la dirección de Mariano Rajoy desde 2011, quien, fiel a su estilo, no hizo nada, ni bueno ni malo, tanto en política nacional como internacional.

Y llegó Pedro Sánchez en 2018. Ciertamente en su primera etapa, tras la moción de censura, y en su segunda, tras su investidura después de las segundas elecciones de 2020, se limitó a hacer lo mismo que su predecesor, es decir nada. Algo más que nada, aunque más bien poco, porque ciertamente manejó con un cierto éxito el apoyo de España a Ucrania tras la invasión de Rusia, aún en contra de las posiciones del ala comunista del Gobierno, totalmente prorrusa.

Pero las cosas han cambiado con las elecciones de 2023. Tras la espantosa masacre terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre dos ministras comunistas del Gobierno, Irene Montero e Ione Belarra, se mostraron públicamente de facto de parte de los terroristas, al igual que, un poco menos explícitamente (pero no mucho), la vicepresidenta Yolanda Díaz. Las cosas parecían que podían volver a encaminarse tras la investidura, con la salida del Gobierno de Montero y Belarra; pero la entrada en dicho Gobierno como ministros de otros dos explícitos proterroristas palestinos (fueron dos de los 21 europarlamentarios que votaron en contra de condenar la masacre perpetrada por Hamás, mientras que la propuesta fue aprobada con que fue aprobada con 24 abstenciones y por 500 votos favorables), Ernest Urtasun y Sira Rego, no presagiaba nada bueno.

Mas lo que nadie esperaba era el posicionamiento del mismo Presidente de Gobierno. Pedro Sánchez se esforzó vez tras vez por equiparar al Estado de Israel, una democracia perfectamente homologable a las occidentales, donde reina la libertad individual y una Justicia independiente, a sus atacantes terroristas gazatíes de Hamás que los masacraron, una zona gobernada por una subcultura en la que la tiranía religiosa, la falta de libertad, la ausencia de un poder judicial y los linchamientos públicos son moneda corriente. Ello llevó a la protesta diplomática de Israel primero y la retirada de su embajadora en España después.

Uno de los ejes centrales de Pedro Sánchez parecía ser en principio su proyección personal (que afectaría positivamente a España) en la Unión Europea a través de la presidencia de turno de la UE de España en el segundo semestre de 2023. Pero la cosa no pudo terminar peor cuando Sánchez optó por encararse con malos modos con el líder del Partido Popular Europeo (uno, dos y tres). España se convirtió en ese mismo momento en un socio impresentable dentro de la Unión Europea.

Y para rematar la faena (por ahora) tenemos la decisión de, en la más pura línea de Zapatero, escupir en la cara a Estados Unidos (y de paso insultar a la Unión Europea), optando por, en vez de colaborar con la única potencia mundial, posicionarse al lado de los terroristas hutíes, aliados incondicionales de Hamás. España se vuelve un socio en quien no poder confiar en absoluto para la Unión Europea y un país infiel y traidor para Estados Unidos. De una sola tacada.

Alguien podría decir que España puede sobrevivir sin problemas en la esfera internacional sin la confianza de los países de la Unión Europea, Israel y Estados Unidos. ¿Seguro? Sobrevivir sí, pero no sin problemas. ¿Recuerdan el comportamiento de Francia, cuando el aislacionismo franquista, protegiendo a terroristas etarras? No llegaremos a esa gravedad. O sí. Porque ahí está la amenaza terrorista islamista, que se puede cobrar de una sola vez más víctimas que las producidas por ETA en toda su historia. Porque cuando hablamos de que España se indispone con Estados Unidos e Israel estamos hablando también de indisponerse con los dos mejores servicios secretos del mundo, la CIA y el Mossad. No sé cuanta información le pasará la CIA al CNI español de ahora en adelante (me temo que poca, tras el insulto recibido por su país), pero sí estoy seguro de la cantidad que recibirá del Mossad: absolutamente nada.

Por no hablar de que Marruecos cada día está más cerca de convertirse en socio preferencial, en detrimento de España, de Estados Unidos e Israel. Una cuestión, la recurrente problemática hispano-marroquí, en la que la Unión Europea también puede optar por ponerse de perfil, dejando a España completamente sola.

La confianza internacional se tarda muchos años en ganarla. Pero muy poco tiempo en echarla a perder. Y nuevamente un largo periodo en volver a tenerla. España trabajó durante 27 años una ventajosa posición internacional. Zapatero la echó por tierra en un breve tiempo. Y hasta estos tiempos, 19 años después, ahí había estado, al nivel del pavimento. Pero hoy Sánchez se esfuerza con ahínco en cavar hacia el subsuelo, y en todas las direcciones (Israel, UE, EEUU), por anteponer su ideología extremista y su egolatría personal (trató a Netanyahu en Israel y a Weber en el Parlamento Europeo con los mismos desprecios e insultos con los que trata cada día en España a Feijóo, olvidando que ni Israel ni la UE son España). Las consecuencias a pagar por ese desatino pueden durar lustros (lo de Zapatero iba camino de cuatro). O decenios, si no aparece un gobernante que sepa enderezarlas. Unas consecuencias que con toda seguridad no pagará Sánchez, sino, en mayor o menor grado (me temo lo primero, por como pintan las cosas), el conjunto de los españoles.

Los amigos (hutíes) de mis amigos (Hamás) son mis amigos

Podría caber alguna duda
(no para mí, por supuesto) de si Pedro Sánchez se posicionó a favor de Hamás
o intentó mantener una equidistancia entre el grupo terrorista e Israel. De lo que no cabe la menor duda es de que el posicionamiento español fue agradecido por
el grupo terrorista que masacró atrozmente a Israel el 7 de octubre y de que ese agradecimiento no fue comentado en ningún sentido por ningún miembro del Gobierno español.

Lo anterior es el prólogo de lo que viene. Tras haberse comprometido a participar junto a Estados Unidos y a los demás países de la Unión Europea, España vetó esa participación de la organización europea en la lucha contra terroristas hutíes que se dedican a atacar barcos en el Mar Rojo, unos terroristas que, muchísimo ojo al dato, son aliados incondicionales de Hamás y que perpetran esas acciones contra buques que se dirigen desde países asiáticos a países occidentales en general y a puertos israelíes en particular. Se puede leer que el ‘no’ [de España] fue «duro y político».

Ese veto, por supuesto, no hizo la menor gracia ni a Estados Unidos ni a los demás países de la Unión Europea (todos ellos, recordemos, comprometidos en la lucha contra los terroristas hutíes, a excepción de España). El aislamiento de España, por lo tanto, no es una opinión, sino un hecho. Así las cosas el Gobierno español se vio obligado a dar marcha atrás, al menos en parte, ya que de lo contrario pasaría a ser un paria ante EE.UU. y la U.E. Por ello levantó el veto, pero a la vez se negó a participar en misiones antiterroristas en la zona junto a sus aliados (aliados al menos teóricamente) americanos y europeos. Esa parcial marcha atrás fue del todo obligada, porque era evidente que España podía no participar en la misión, pero lo que era una auténtica barbaridad era obligar a los demás países de la Unión Europea (es necesario insistir en que todos) a que ellos igualmente, contra su voluntad, no formaran parte de esa misión antiterrorista, por el solo hecho de la voluntad española.

La consecuencia (la primera, vendrán más -y peores-) no se hizo esperar. Los terroristas hutíes, al igual que hicieron los de Hamás, felicitaron al Gobierno de España por su decisión.

Lo anterior son hechos incuestionables. Mi valoración es simplemente que lo que Sánchez está haciendo es aplicar el dicho de que los amigos de mis amigos son mis amigos. En este caso que los amigos terroristas hutíes de mis amigos terroristas de Hamás son mis amigos. Y por eso no voy a actuar contra ellos.

La deriva española (limitarla a sanchista sería minimizarla, porque fuera se habla de España, no de Sánchez) en política exterior no es ya preocupante, sino que es como mínimo muy preocupante, rozando lo casi suicida. Tiempo habrá para analizarla.

Estaba seguro de que la queja de Sánchez por #MeGustaLaFruta era una inocentada de 'Okdiario'

Sinceramente, cuando vi en la pantalla de mi teléfono móvil el titular de la noticia (pantallazo al lado) me reí. Pensé, y no exagero lo más mínimo, que había sido una buena ocurrencia por el Día de los Inocentes. Entré para ver el desarrollo de la, según yo, inocentada. Para confirmarla miré la fecha. Y ahí fue donde las cosas no empezaron a cuadrar. 27/12/2023 14:47. Aun así me parecía increíble
que todo un Presidente de Gobierno se rebajase a tratar un asunto tan anecdótico. Así que pinché en el vídeo. Y fue cuando me reí de veras.

Debería ser absolutamente reprochable, cuando no condenable, el que pues a un líder de otro partido político se bromee diciendo 'me gusta la fruta'; me parece absolutamente deleznable (sic).

Y como cuando un tonto coge un camino, el camino se acaba, pero el tonto sigue, Sánchez siguió, quejumbroso, con el temita unos segundos más.

Lo dicho, sin duda fue mi mejor momento del día, cuando me reí con ganas. Y es que Pedro Sánchez, con la egolatría que profesa hacia Su Persona, ha acabado perdiendo los referentes del decoro en
una alocución y ha terminado por convertirse en
una caricatura de sí mismo.

Ortega Smith, haciendo favores a Sánchez

Y ya tenemos de vuelta la burra al trigo, la burra de Vox al trigo de la violencia política. Si hace un par de semanas era Abascal el que montaba el pollo con lo de colgar por los pies a Sánchez, ahora es Ortega Smith el que la lía parda, dedicándose a hacer volar botellas de agua, aparentemente vacías, por los aires.

Acto este de Ortega Smith que, como las anteriores palabras de Abascal, solamente benefician a Sánchez, que aprovecha estas oportunidades para mantener permanentemente movilizado a su electorado contra la derecha. Bueno, no. También benefician a Vox, que así puede intentar frenar su constante pérdida de apoyos por medio de contentar a los muy cafeteros, que al parecer son los únicos que le van quedando.

Y con esta polarización (palabra de moda) todo apunta a que quien lo tiene más crudo es el PP, que se va quedando en algo parecido a una tierra de nadie, al menos por ahora. Lo dicho, a este paso, a trancas y barrancas, tenemos Sánchez para lustros.

Sánchez vuelve a insultar y provocar a Israel

Y ya tenemos de nuevo
la burra de vuelta al trigo. La burra de Sánchez de vuelta al trigo de los insultos y las provocaciones a Israel. Ahora ha aprovechado la ocasión de la felicitación navideña a los militares españoles en el extranjero (hay que ser miserable) para volver a cargar contra Israel con gruesas palabras (durante su intervención, Sánchez ha criticado que Israel «está provocando un sufrimiento insoportable» a la población civil de Gaza).

Evidentemente este sujeto no da puntada sin hilo. La primera vez pudo ser un error (y por eso se lo pasó el Gobierno de Israel), pero las siguientes no (y por eso los israelíes protestaron primero y retiraron a la embajadora después). Pues el tipo sigue erre que erre. Y lo hace precisamente ahora, cuando habían salido noticias de que las autoridades israelíes podrían estar barajando la posibilidad de que la embajadora israelí regresara a España a principios de enero.

En lugar de buscar el encuentro diplomático con los israelíes parece que Sánchez busca todo lo contrario, que la confrontación se mantenga, e incluso que aumente. Y para ello no duda en insultar y provocar cada vez que puede a Israel.

Veremos como prosigue la cuestión. Pero en Israel no son dados a mirar hacia otro lado ante las ofensas. Y las de Sánchez son continuas.

Jaime del Burgo vuelve a la carga revelando su supuesta relación amorosa con la reina Letizia estando ya casada y con sus dos hijas

El hombre había borrado la información, aunque en internet todo se queda. Ahora regresa con el tema. Aquí están los dos tuits más imporantes y debajo los pantallazos de los mismos, por si los vuelve a borrar.




La diferencia entre las militares de Israel y las terroristas de Hamás en una sola foto (gracias, @CarlosQ11218894) -sin comentarios-

Interesantes información y opinión de @Defensa_Israel sobre como "Israel debe reconquistar y reasentarse en el norte de la Franja de Gaza" (sin comentarios)

Lo mejor y más objetivo que he leído sobre "la sentencia del TJUE en el caso Superliga" (muchas gracias, @IreneAguiarG) -sin comentarios-

Vídeo de 1 min. del del Secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, hablando del final de la guerra en Gaza (gracias, @Defensa_Israel) -sin comentarios-

Dos ejemplos de ataques indiscriminados continuados de Hamás a la población civil israelí (gracias, @roitele1 y @Defensa_Israel) -sin comentarios-

Cifras israelíes de "combatientes de Hamás muertos en Gaza", "terroristas de Hamás que murieron durante el ataque a Israel el 7-O" y "civiles que también se sumaron a las masacres y a los saqueos, y que murieron mientras intentaban volver a Gaza" (gracias, @Defensa_Israel) -sin comentarios-

Interesante hilo de @FJMogaburo sobre su experiencia personal de "usarlo [Twitter] asiduamente para estar informado sobre la guerra de Gaza" (sin comentarios)

Viñeta de la reacción mundial ante otras guerras y ante la guerra en Gaza (gracias, @Defensa_Israel) -sin comentarios-

2 vídeos (7 min. y 1 min.) sobre el entrenamiento militar y el lavado de cerebro a los niños palestinos (gracias, @Defensa_Israel) -sin comentarios-

9 amigos

En la votación de hace unos días en la Asamblea General de Naciones Unidas exigiendo a Israel un alto el fuego inmediato en su guerra en Gaza (panel del resultado de la votación sobre estas líneas) diez fueron los países que votaron en contra (nueve más Israel) y veintitrés los que se abstuvieron, mientas que el resto, 153, votaron a favor. Israel puede medio contar con veintitrés naciones y sabe que sus verdaderos amigos en todo el mundo son únicamente nueve. Es lo que hay.

Cosas que nos helarán la sangre (33): Socialistas defendiendo activamente a Bildu

Se acuerdan de aquello de “Con Bildu no vamos a pactar, si quiere se lo digo 20 veces”. Pues, como en tantas otras cosas, Pedro Sánchez no mentía, sino que ha cambiado de opinión. Y ahora ya pactan. Bueno, es que no solamente pactan, es que los socialistas también defienden a los filoetarras con todas sus fuerzas. Cosas que hielan políticamente la sangre. Y lo que te rondaré, morena.

No, señor Puente, no, Bildu no es un partido democrático, y le digo la razón

Dice Óscar Puente, ministro de Transportes del Gobierno de Pedro Sánchez, en el vídeo que acompaña a la noticia que él cree "que en este momento Bildu... es un partido democrático que ha cumplido con las reglas de nuestro país" y bla, bla, bla.

Bildu hasta este momento no ha condenado los atentados terroristas de ETA. Pero es que, y esto es muchísimo más grave, no hace los quince años que dice Puente del fin de ETA, si no hace tan solo medio Bildu llevó en sus listas a las elecciones municipales un total de 44 personas condenadas por terrorismo -siete de ellas con delitos de sangre en su haber-. Y hasta este momento es lo que Bildu ha venido haciendo regularmente, incluir terroristas en sus listas elección tras elección.

Así que no, señor Puente, Bildu no es un partido democrático, porque no ha condenado la violencia terrorista etarra y continuamente lleva en sus listas electorales a terroristas de esa banda. Otra cosa es que usted, señor Puente, esté dispuesto, como su jefe, a pagar cualquier precio para seguir en el poder. Cualquiera.

Información y vídeo de @Defensa_Israel sobre "el túnel de ataque de Hamás más grande jamás descubierto por el ejército [de Israel]" (sin comentarios)

Cosas que nos helarán la sangre (32): Sánchez respondiendo amablemente a un desafiante prófugo de la Justicia, Puigdemont

Dice Rosa Díez:

Los diputados también guardarán en su memoria ese momento en el que
un primer ministro respondía a un prófugo
de la Justicia. Porque todos los grupos políticos -todos, incluido el grupo socialista- tenían un acuerdo en base al cual nadie, en ninguna comisión, en ninguna instancia, respondía a Puigdemont. Hasta que llegó el felón Pedro Sánchez y se arrastró ante él en el Pleno para blanquear al delincuente y ensuciar, aún más, la imagen de España.


No lo sabía.

Y no solamente eso, sino que he leído que el discurso de Puigdemont fue, muy en su línea, en plan chulo, desafiante. Al que, por supuesto, Sánchez respondió cortésmente, como siempre que contesta a aquellos de los cuales necesita su apoyo, por muy indeseables que sean.

Lo dicho, cosas que políticamente le hielan la sangre a uno. Y ya van 32.

Vídeo de ½ min.: La solución del embajador de Israel ante la ONU para 'un verdadero alto el fuego que durará para siempre'" (sin comentarios)

Sobre colgamientos de los pies, tiros en la nuca, colgamientos de las catenarias y guillotinas

La condena de las palabras de Santiago Abascal sobre que algún día el pueblo español pedirá colgar de los pies
a Sánchez ha sido generalizada; como debe ser. Cuando una concejal del PP pidió un tiro en la nuca para el mismo Sánchez el partido de Feijóo la expulsó y exigió su renuncia como concejal; como debe ser.

Mientras tanto yo me pregunto por qué una persona que amenazó con guillotinar a Felipe VI y/o (esto no me quedó claro) lanzarlo a los tiburones fue ministra hasta hace bien poco. No es el único caso. Últimamente se han rescatado asuntos de amenazas o deseos (no queda claro) de guillotinar a Rajoy, nuevamente a Felipe VI y colgar de la catenaria o tumbar sobre las vías a Esperanza Aguirre.

Por cierto, hace poco más de un mes leímos nada más y nada menos que el portavoz de Más Madrid en Las Rozas sugiere guillotinar a Esperanza Aguirre.

Los dos primeros casos afectan a la derecha y a la extrema derecha, mientras que los últimos cinco corresponden a la izquierda y a la extrema izquierda. ¿Qué pasa, que izquierda y extrema izquierda pueden amenazar de muerte mientras que derecha y extrema derecha deben ser condenadas por ello? No seré yo quien defienda esta condenable forma de actuar. Pero las condenas deben ser parejas. No vale hacer ministra a una tipa que amenaza con guillotinar y condenar a un tipo que amenaza con colgar de los pies. Digo yo.

Sentencia judicial en España: "Los testigos de Jehová, «secta» con «víctimas»", en 'El Mundo' (sin comentarios)

Fuente.
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Durísimo: "En dos partes el relato de una sobreviviente del festival Nova" (gracias, @GabyLob)

Espantoso vídeo (1 m. 42 ss.), sobre todo al final, del cadáver del rehén israelí brutalmente torturado y asesinado por Hamás

Nuevo hilo, "un poco mejorado", de @EmilyYZH sobre "evidencias que prueban la participación de los civiles palestinos en lo ocurrido el 7 de Octubre mientras HAMAS realizaba la masacre en Israel"

El anterior lo borró por error:

Señor Abascal, ¿quiere usted 'colgar de los pies' a Sánchez, como a Mussolini, en vez de ganar unas elecciones?

Los alegres chicarrones de Vox nos tienen acostumbrados a escuchar ocurrencias de sus labios, compitiendo a veces para ver quien dice la burrada más grande. En ese campeonato parece que ha querido entrar también Santiago Abascal, quien ha afirmado que "habrá un momento" en el que el pueblo querrá "colgar de los pies" al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Lo primero que me vino a la mente cuando leí semejante barbaridad fue la muerte de Benito Mussolini, el líder fascista italiano, al que, tras asesinarle al final de la Segunda Guerra Mundial, colgaron su cadáver por los pies en una plaza de Milán, junto a su amante y otros fascistas, para someterlo a escarnio público.

¿Es eso lo que pretende hacer Abascal con Sánchez? Dirá que no. Pero el jefecillo voxero conoce perfectamente el macabro suceso relatado y sin la menor duda ha dejado caer sus lamentables palabras para que las relacionemos con el mismo, pero sin decirlo explícitamente. Vamos, lo que comúnmente se llama tirar la piedra y esconder la mano.

En cualquier caso es una apelación directa a la violencia. Violencia que, por cierto, poco a poco se va instalando en la política española, desde que empezó a ser practicada por la extrema izquierda precisamente contra miembros de Vox. Algo muy peligroso, porque estas cosas se sabe como empiezan, pero no como terminan. Y es que la voluntad del pueblo no se manifiesta colgando de los pies a nadie, señor Abascal, sino en las urnas. Votando.

Claro, es mucho más fácil decir auténticas barbaridades (que, dicho sea de paso, favorecen a Sánchez) que ganar unas elecciones, algo de lo que está cada día más lejos Santiago Abascal. Empiezo a pensar que tal vez tengan algo de razón aquellos que dicen que mientras exista Vox Sánchez seguirá en La Moncloa. Y con despropósitos como este cada vez más.

Otra vez Sánchez espatarrao ante el himno

Ya ocurrió hace un mes. Hace unos días, a cuenta de la celebración del Día de la Constitución, lo ha vuelto a repetir. Pedro Sánchez con las piernas abiertas, en una actitud casi indolente, que contrasta vergonzosamente con la posición de firmes que mantienen todos los que le rodean (ver foto del momento, al lado).

Evidentemente no puede ser un error, porque lo hace vez tras vez. Supongo que es una forma de manifestar su desapego a los símbolos de la nación, su relativismo en este tema (como en los demás, dicho sea de paso). Sea como fuere, es una actitud lamentable en quien es el Presidente del Gobierno de España.

Interesantísimo tuit de @Defensa_Israel: "Por qué Tzahal [Fuerzas de Defensa de Israel] fue sorprendido por el ataque"

"¿Dónde está el apartheid?" La respuesta en dos frases (gracias, @GabyLob)

The 14 scoundrels in the US House of Representatives (names and photos) who refused to condemn anti-Semitism (no comments)

"Strongly condemning and denouncing the drastic rise of antisemitism in the United States and around the world."
No, they didn't.


Jamaal Bowman, U.S. House of Representatives from New York's 16th district, Democratic:












Cori Bush, U.S. House of Representatives from Missouri's 1st district, Democratic:












Gerry Connolly, U.S. House of Representatives from Virginia's 11th district, Democratic:












Jesús G. "Chuy" García, U.S. House of Representatives from Illinois's 4th district, Democratic:












Raúl Grijalva, U.S. House of Representatives from Arizona's 7th district, Democratic:












Pramila Jayapal, U.S. House of Representatives from Washington's 7th district, Democratic:












Summer Lee, U.S. House of Representatives from Pennsylvania's 12th district, Democratic:












Thomas Massie, U.S. House of Representatives from Kentucky's 4th district, Republican:












Alexandria Ocasio-Cortez, U.S. House of Representatives from New York's 14th district, Democratic:












Ilhan Omar, U.S. House of Representatives from Minnesota's 5th district, Democratic:












Ayanna Pressley, U.S. House of Representatives from Massachusetts's 7th district, Democratic:












Delia Ramirez, U.S. House of Representatives from Illinois's 3rd district, Democratic:












Rashida Tlaib, U.S. House of Representatives from Michigan's 12th district, Democratic:












Bonnie Watson Coleman, U.S. House of Representatives from New Jersey's 12th district, Democratic:












Fuente.