Fuego en Galicia: Un ileso y cuatro achicharrados

El Partido Popular y su líder, Alberto Núñez Feijóo, jugaban con fuego en las elecciones autonómicas gallegas que se celebraron ayer. Una serie de errores no forzados de los populares en plena campaña electoral habían hecho que su mayoría absoluta, la única que les podía hacer gobernar, corriera serio peligro. Hasta tal punto que estoy seguro de que hubieran firmado los 38 escaños que les permitían gobernar. Pues no, no sacaron ese número, sino dos más. Un auténtico éxito, teniendo en cuenta que ya llevaban cuatro mayorías absolutas consecutivas, que presentaban un candidato que ni de lejos tenía en Galicia el tirón electoral de Feijóo y que el propio Feijóo había cometido una serie de estupideces políticas en el ruedo nacional. Jugaron con fuego y salieron totalmente ilesos de la peligrosa actuación.

Pero los que sí se quemaron fueron casi todos los demás. Bueno, más que quemarse se achicharraron. El PSG, tras las ya mentadas cuatro mayorías absolutas peperas, no pudo ni mantener los mismos resultados, sino que se hundió hasta quedarse con la friolera de cinco menos (alucinante cuando el PP perdió dos). Ni el desembarco de líderes nacionales, con el propio Pedro Sánchez a la cabeza, evitó la debacle. Indudablemente el tema de la amnistía a los políticos catalanes secesionistas ha tenido un alto coste para los socialistas. Los gallegos han decidido darle una patada a Sánchez en el trasero del PSG.

Otros que se achicharraron fueron los de la extrema izquierda, tanto los de Sumar como los de Podemos. Extraparlamentarios los dos. Desastre total. Nada más que añadir.

Y otros abrasaditos por completo fueron los de Vox. Es increíble que en una autonomía donde un ministro franquista sacó en democracia varias mayorías absolutas (que ya es decir) la extrema derecha no sea capaz de arrebatar al PP al menos un diputado por provincia para condicionar el gobierno. Una derrota sin paliativos.

Los que ni salieron ilesos ni se achicharraron fueron los de la izquierda independentistas del BNG. Fue un éxito subir seis escaños y arrasar a toda la izquierda. Pero un éxito totalmente amargo, porque les sigue situando en la oposición. Tendrán que esperar otros cuatro años para ver si las matemáticas partidocráticas les permiten algo más. Pero durante ese tiempo tiene que llover mucho (y más en Galicia).

Y finalmente está esa cosa que me parece bastante folclórica de Democracia Orensana, que sacaron un diputado, que para ellos evidentemente será fantástico, porque nunca lo habían conseguido, pero para los demás es totalmente intrascendente, porque no tendrán ningún tipo de influencia en ningún sentido.

Resumiendo. Las cosas quedan como estaban, tanto en la política gallega como en la nacional. Que nadie espere que esto afecte a Sánchez para nada. El próximo asalto, las elecciones vascas, donde también todos se juegan mucho. Pero eso ya será harina de otro costal. Y mientras tanto tendremos a la amnistía de nuevo en el centro de la pista política. El espectáculo debe continuar.

Las elecciones gallegas y la estupidez de Feijóo

Las elecciones autonómicas gallegas tocaban en julio, pero el actual Presidente y candidato del PP, Alfonso Rueda, las adelantó al 18 de febrero en la seguridad de que las negociaciones de Pedro Sánchez con los independentistas catalanes de Junts para amnistiar al fugado Puigdemont otorgarían a los peperos una cómoda mayoría absoluta.

Esa supuesta cómoda mayoría absoluta empezó a dejar de ser cómoda desde bastante antes del comienzo de la campaña electoral, con unas encuestas que, en el mejor de los casos, le daban al PP un par de escaños por encima de la mayoría absoluta. Evidentemente Rueda no tenía el tirón de Feijóo. Pero las cosas se han complicado sobremanera en la última semana, con unas declaraciones del líder nacional pepero en las que nos dejaba saber que por iniciativa suya representantes del PP se reunieron con representantes de Junts para estudiar las posibilidades de que este partido independentista catalán, que intentó secesionar a Cataluña de España ilegalmente y cuyo líder es un prófugo de la Justicia española, apoyara la investidura de Feijóo como Presidente de Gobierno. Y, por si lo anterior fuera poco, dejaba caer que podría existir la posibilidad de que él indultara a Puigdemont bajo determinadas condiciones. Nada más y nada menos. Una estupidez en toda regla.

Lo anterior ha dado un auténtico balón de oxígeno a sus rivales políticos de cara a las urnas que se abrirán, recordemos, en menos de 48 horas, tanto a izquierda (PSOE), extrema izquierda independentista (BNG), como extrema derecha (Vox). Ninguno de ellos se imaginaba este regalo pepero en la recta final, un auténtico gol en propia puerta. Vamos, que la estupidez de Feijóo le puede costar al PP el Gobierno de Galicia. Lo que podría conllevar que su liderazgo, que quedó tocado después de la derrota en las generales, fuera puesto en cuestión de forma abierta. Veremos lo que ocurre dentro de dos días.

Por cierto, que la negativa a dar la cara y debatir de Rueda ahora, dando por sentada una victoria que no quiere arriesgar, me recuerda que Feijóo hizo exactamente lo mismo antes de las generales. Y ya vimos el resultado. No digo que se va a repetir la amarga victoria pepera de ganar y no poder gobernar. Pero es posible. Lo dicho, en dos días llegará la hora de la verdad, sin más historias.

La estupidez de Feijóo según Cipolla

Dejó escrito Carlo M. Cipolla (pronúnciese Cipola) que "personas
que uno ha considerado racionales e inteligentes en el pasado se revelan después, de repente, inequívoca e irremediablemente estúpidas", que estúpidos hay en todas partes, independientemente de su educación, empleo, posición social, nivel económico, etc. y que "una persona estúpida es una persona que causa un daño a otra persona o grupo de personas sin obtener, al mismo tiempo, un provecho para sí, o incluso obteniendo un perjuicio". Esto último es muy interesante, porque Cipolla dice que el malvado es quien obtiene ganancia para sí a costa de perjudicar a los demás, el incauto es aquel que produce ganancias a los demás al precio de perjudicarse a sí mismo e inteligente es aquella persona cuyas acciones producen beneficios tanto para sí misma como para los demás. Pero estúpido es aquel, como mencionamos anteriormente, cuyas acciones producen daño a los demás sin que él obtenga beneficio alguno, e incluso en determinadas ocasiones dañándose también a sí mismo.

Este es el caso de Feijóo con las reuniones de sus enviados con los enviados de Puigdemont. Desde el primer momento era completamente evidente la total imposibilidad de que Vox y Junts apoyasen al mismo tiempo la investidura de Feijóo. Igualmente se podía ver a las claras que, en el imposible caso de producirse, el apoyo de unos indeseables como los golpistas catalanes sería visto como una traición por los votantes peperos. A lo que cabe añadir que hacer depender la legislatura completa de unos elementos así, a los que había que conjugar con Vox, era algo que iba a ser en la práctica de todo punto inviable. Todo eso lo podía ver cualquiera. Menos Feijóo.

En los dos últimos días, en los artículos que he enlazado, le he dedicado al gallego adjetivos de todos tipo, menos bonito. Aficionadillo, torpe, inútil, estúpido, incompetente e idiota, imbécil, nuevamente estúpido y finalmente inepto. Y me reafirmo en cada uno de ellos. Pedro Sánchez es, sin duda, un ser malvado, porque continuamente comete actos que dañan a los demás en provecho propio. Pero es que Feijóo cae de lleno en ser un auténtico estúpido, porque lo de reunirse con los de Puigdemont estaba a todas luces claro que iba a terminar mal, muy mal, siendo las consecuencias un daño para los españoles (que desconfiarían de Feijóo por tamaña estupidez e incongruencia) y, por lo tanto, también para él mismo. Aunque, claro, también se le puede calificar a Feijóo en pequeño grado de incauto. Porque ciertamente sus acciones tienen un claro beneficiario. Pedro Sánchez.

Casimiro García-Abadillo: "Hubo dos reuniones y una cena en la que los enviados de Puigdemont y los mensajeros de Feijóo intercambiaron ideas y propuestas"

El título del artículo (Fantasías de Madrid) creo que no hace honor al contenido, por lo que he decidido poner una frase del mismo que creo que sí lo hace.

Básicamente concuerdo con la el deseo de financiación catalana de los separatistas, el que quiera una autonomía que se la pague

Hace doce años (el tiempo vuela) escribí un texto titulado El que quiera una autonomía, que se la pague. Mantengo lo que dije allí. No se puede querer una autonomía para estar solo a las maduras, sino que hay que estar también a las duras. Las competencias autonómicas las debe financiar cada autonomía como buenamente (o malamente) pueda. Y no hay más.

Lo que no puede ser es que algunas autonomías se financien con cargo a la deuda (que nadie sabe ni cuando ni como la pagan a pagar, aunque todos lo suponemos: nunca) y otras lleven sus cuentas correctamente. Tampoco puede ser que unas autonomías estén financiando a otras.

¿La solución? Pues es simple. Que el Estado se financie con unos determinados impuestos y las autonomías con otros (los que cada una decida en su libre ejercicio). Y nada de transferencias ni de historias raras. ¿Eso va a crear una diferencia en los servicios ofrecidos por las diferentes autonomías a sus habitantes? Por supuesto. Pero esos habitantes tienen la opción de mudarse. Al igual que no se ofrecen los mismos beneficios en Alemania que en España, tampoco tienen por qué ofrecerse los mismos beneficios en Cataluña que en Extremadura.

Es aceptar lo anterior o volver a un Estado central, a la francesa. Lo que no puede ser es querer una autonomía, pero que la paguen otros.

El tuit de Doña Isabel Díaz Ayuso tras su reunión con una exrehén de Hamás y con familiares de algunos secuestrados (sin comentarios)

Impactante vídeo de 31 seg.: Un palestino de Cisjordania intenta apuñalar a un policía israelí y es abatido (sin comentarios)

Entonces, ¿la liberación sexual femenina era esto?

Mujeres en busca de un hombre para casarse pero sin encontrar ninguno que llene sus expectativas. ¿Ese es el resumen de la liberación sexual femenina? Me acordé de un texto que publiqué sobre el tema hace cinco años. Y la misma sonrisa triste de entonces regresó a mis labios.

Ni soy rico, ni guapo, ni joven. Pero soy buena persona. Y solo por eso he tenido oportunidades de acostarme con mujeres que me han buscado, no descaradamente pero sí claramente, en mi trabajo para ver si a partir de ahí surgía alguna relación medianamente estable. Creo en la fidelidad matrimonial y nunca he dado ningún paso en ese sentido. Pero he visto como otros hombres a mi alrededor, en circunstancias similares, se han aprovechado de la situación para acostarse con ellas por algún tiempo y después si te he visto no me acuerdo.

¿Esto es la liberación sexual femenina? ¿Que una mujer se entregue sexualmente a un hombre para tratar de conquistarle y, después, tal vez establecer algún tipo de relación estable, para, mucho después, es posible que se casen? ¿Y que los hombres, conscientes de ello, se acuesten con las que aparecen sin dar ningún paso de compromiso? Pues, si esto es la liberación sexual femenina, no veo yo donde están las ventajas.

La Fiscalía pidiendo ¡retirarles seis años la patria potestad! a unos padres por educar a su hijo en casa un año (gracias @Cristi_latin)

Lo leo a través de mi buena amiga tuitera @Cristi_latin y alucino. Unos padres decidieron educar en casa a su hijo durante un año, porque la educación en la escuela pública le estaba creando problemas, y ahora se han visto obligados a comparecer ante la Justicia por "abandono de familia" y la Fiscalía pide para ellos como castigo la retirada de la patria potestad ¡por seis años!

Hace tiempo que no toco el tema, pero yo soy un ferviente defensor de la educación en casa. Incluso en la zona de campañas del blog (columna derecha) tengo una campaña, titulada Homeschooling no es un crimen. A mi hijo y a mi hija los eduqué en casa en ese sistema, a ella hasta el grado seis (en ese punto decidió ir a la escuela pública, que en Texas tiene una calidad decente) y a él durante los doce años.

Soy consciente de que se pueden producir abusos. Por eso, por ejemplo, en Florida los homeschoolers tienen que pasar un test anual; algo que no existe en Texas. Pero lo que es un abuso total es la prohibición de facto, como es el caso en España. Como bien dice @Cristi_latin en un comentario, en España el homeschooling es alegal (ni legal, ni ilegal), y de eso abusa la Fiscalía para, como muy bien sigue diciendo Cris, aterrorizar a los padres. Al final se acaba dando la razón a los padres, pero después de un durísimo juicio.

Hace falta, para terminar con estas canalladas de la Fiscalía, que de una buena vez se legalice la educación en casa, con un control educativo una vez al año si se quiere, para evitar abusos. Porque, repito, homeschooling no es un crimen

Espantoso vídeo de 11 min. del comportamiento de los civiles en Gaza y los espantosos hechos en Israel del 7-O (sin comentarios)

"Ninguna mujer. El borrado de la mujer era esto." (gracias, @IreneAguiarG)