miércoles, 5 de enero de 2005

Zapatero apadrina al tirano Castro ante la Unión Europea

La BBC nos cuenta que Cuba está normalizando sus relaciones diplomáticas con ocho países de la Unión Europea. Es muy interesante recordar que esas sanciones diplomáticas y políticas se impusieron a raíz de que Cuba encarceló, juzgó y condenó a altas penas de prisión a 75 líderes de la oposición política al régimen en Marzo del 2003.

Pues bien, ese acercamiento político entre determinados países de la Unión Europea y el régimen comunista cubano tiene un valedor: Rodríguez Zapatero. Desde que llegó a la Moncloa, el más izquierdista de todos los presidentes de España de la democracia reciente se dedicó a criticar a Estados Unidos y a defender a Cuba. Como resultado, hoy Estados Unidos (la democracia más antigua del mundo) ha casi aíslado políticamente a España, y España le está abriendo camino donde puede a Cuba (una de las pocas tiranías comunistas del planeta).

Pero lo curioso es el argumento que se usa para defender al dictador. Porque si la decisión de sancionar políticamente al régimen comunista cubano se tomó por la Unión Europea a causa del mencionado encarcelamiento y condenas a 75 líderes políticos opositores, la decisión de levantar esas sanciones se toma porque el comunismo cubano ha libertado a 14 el pasado año.

Sin duda es reconfortante saber que hay 14 inocentes menos entre los presos políticos cubanos. Pero la pregunta que yo me hago es la siguiente: ¿Y qué de los otros 61? ¿Acaso esos 61 no merecen que las sanciones sigan vigentes? Y eso sin contar los otros presos políticos detenidos antes y después de Marzo del 2003.

Pues no, para Zapatero lo que ha hecho el régimen es suficiente para apadrinar al tirano Castro ante la Unión Europea. Y en función de ello parece que el primer logro de Zapatero en política exterior es el levantamiento de sanciones contra una brutal dictadura.

Triste, muy triste.

martes, 4 de enero de 2005

¿Debe Turquía formar parte de la Unión Europea?

La cuestión de si Turquía debe o no formar parte de la Unión Europea no es, evidentemente, nada fácil de resolver. La verdad es que personalmente tengo algunas reservas. Pero, aún con dichas reservas, por ahora soy partidario de una respuesta negativa. Y a continuación quiero aportar mis razones para ello.

En primer lugar, por una cuestión geográfica. Aunque una parte de Turquía está en Europa, no por eso puede ser calificado Turquía como país europeo. Y es que la realidad es que el 95% del territorio turco está en Asía, mientras que la parte europea de Turquía es solamente el 5%. Por lo tanto, Turquía es más un país asiático que un país europeo.

En segundo lugar, por una cuestión democrática. Los usos y costumbres democráticos (incluidos los derechos civiles y los derechos humanos) no son respetados en Turquía tal y como se respetan en los países de la Unión Europea.

En tercer lugar, por una cuestión religiosa. No hablo aquí de que la mayoría del país sea musulmán, lo cual entra dentro de la libertad religiosa. Mi cuestionamiento es porque considero que la separación entre religión y estado es muy cuestionable en Turquía. Hay tendencias en la legislación turca a seguir la legislación islámica, mientras que en la Unión Europea la separación de religión y estado está totalmente clara.

En cuarto lugar, por una cuestión económica. El índice de riqueza de Turquía está muy por debajo del índice de los países de la Unión Europea. Ello crearía, de entrar en la Unión Europea, un desbalance a la hora de las ayudas económicas, que, en el peor de los casos, podría incluso colapsar la Unión Europea.

En quinto lugar, por una cuestión demográfica. Turquía tiene más de 67 millones de habitantes. De entrar en la Unión Europea, sería el segundo país más poblado de ésta, solamente superado por Alemania. Ello, tomando el punto anterior, crearía un flujo migratorio hacia los demás países que es muy cuestionable que pudiera ser soportado por la Unión Europea sin resentirse seriamente.

En sexto lugar, la cuestión fronteriza. La lógica dice que las fronteras de la Unión Europea deberían ser Rusia y Turquía. Pero si Turquía entra en la Unión Europea, las fronteras de la Unión Europa se irían hasta Georgia, Armenia, Azerbayán, Armenia, un país tan inestable como Iraq, un país terrorista como Siria y un país que es una amenaza nuclear como Irán. Indudablemente las inestabilidades y peligros de estos países, al ser vecinos de la Unión Europea, podrían ser un serio peligro para ella.

En conclusión, podría ser que en el futuro la situación cambiase, y de ser así, estoy dispuesto a reconsiderar mi posición. Pero personalmente lo dudo mucho. Las razones arriba indicadas me hacen estar en contra del ingreso de Turquía en la Unión Europea.

Hay que impugnar el "Plan Ibarretxe" ante el Tribunal Constitucional

He leído el interesantísimo artículo de Lucrecio en Libertad Digital, donde desarrolla la tesis de que el nuevo Estatuto aprobado por el Parlamento Vasco debe ser constitucional para llegar a ser votado por el Parlamento nacional. Es decir, defiende que desde ya, con energía, debe presentarse una impugnación de dicho Estatuto ante el Tribunal Constitucional, conforme al artículo 161.2 de la Constitución, lo cual solo puede hacer el Gobierno.

Yo, en mi artículo Comienza la presión, del 2 de Enero, aceptaba la vía del PSOE de votar el proyecto en las Cortes, aunque me parecía mejor la vía del PP de impugnar el acuerdo ante el Tribunal Constitucional.

Hoy, una vez leídos los argumentos de Lucrecio, creo que tiene razón. No hay nada que pueda justificar votar una ilegalidad en el Parlamento nacional. Solo lo que sea constitucional puede ser votado. Y, de lo contrario, solo cabría, legalmente, una opción válida: Iniciar el proceso de reforma constitucional previsto en la Constitución. No es el caso del nuevo Estatuto aprobado por el Parlamento Vasco, que intenta reformar la Constitución por una vía totalmente espúrea, y que coloca las instituciones vascas de Parlamento vasco y Gobierno vasco en pie de igualdad con las nacionales.

Ante tal disparate legal no cabe sino seguir la senda marcada por la Constitución, que es la impugnación ante el Tribunal Constitucional por parte del Gobierno.

lunes, 3 de enero de 2005

Israel en comparación con sus países vecinos

Mucho se ha escrito y se escribirá en relación a Israel, mayoritariamente de forma negativa, y casi siempre desde puntos de vista totalmente ideologizados.

En este artículo pretendo hacer, de forma desapasionada, un pequeño análisis comparativo, sobre la forma de gobierno y el respeto a las libertades, de Israel con los países de la zona. Para ello, además de a Israel, analizaremos sus países limítrofes, es decir, de norte a sur en relación a Israel, Líbano, Siria, Jordania y Egipto.

En primer lugar vamos a ver el sistema político que gobierna estos países:

Israel: República democrática.
Líbano: República democrática, con confusión política crónica y elementos de reglas militares.
Siria: República autoritaria, con elementos de reglas militares.
Jordania: Monarquía constitucional, con tendencias autoritarias.
Egipto: República autoritaria.

La conclusión es que el único país de la zona que se puede considerar una democracia real es Israel.

En segundo lugar, veamos un análisis del respeto a las libertades políticas y a los derechos civiles en dichos países. El sistema puntúa de 1 a 7, siendo 1 el ideal y 7 el menos deseado. También el sistema califica a los países, en función de su puntuación, como "libre", "parcialmente libre" o "no libre".

Israel.
Libertades políticas: 1.
Derechos civiles: 3.
Calificación del país: Libre.

Líbano.
Libertades políticas: 6.
Derechos civiles: 5.
Calificación del país: No libre.

Siria.
Libertades políticas: 7.
Derechos civiles: 7.
Calificación del país: No libre.

Jordania.
Libertades políticas: 5.
Derechos civiles: 4.
Calificación del país: Parcialmente libre.

Egipto.
Libertades políticas: 6.
Derechos civiles: 5.
Calificación del país: No libre.

La conclusión es que el único país de la zona con buena puntuación y calificado como "libre" es Israel. Todos los demás reciben calificaciones malas, y son considerados, a excepción de Jordania (que es calificada como "parcialmente libre", y por los pelos), como países "no libres".

En tercer lugar, vayamos a un detallado análisis de estos países, en 5 aspectos diferentes: Lugar democrático en el mundo (1-149), libertades políticas (1-7), derechos civiles (1-7), libertad de prensa (0-100) y corrupción (0-100). Siempre los puntajes bajos son los ideales y los puntajes altos los no deseables.

Israel.
Lugar democrático en el mundo: 38.
Libertades políticas: 1.
Derechos civiles: 3.
Libertad de prensa: 42.
Corrupción: 23.

Líbano.
Lugar democrático en el mundo: 116.
Libertades políticas: 6.
Derechos civiles: 5.
Libertad de prensa: 105.
Corrupción: 86.

Siria.
Lugar democrático en el mundo: 126.
Libertades políticas: 7.
Derechos civiles: 7.
Libertad de prensa: 131.
Corrupción: 62.

Jordania.
Lugar democrático en el mundo: 89.
Libertades políticas: 5.
Derechos civiles: 5.
Libertad de prensa: 91.
Corrupción: 32.

Egipto.
Lugar democrático en el mundo: 122.
Libertades políticas: 6.
Derechos civiles: 6.
Libertad de prensa: 127.
Corrupción: 68.

Ahora bien, obviaremos las comparaciones en las áreas de libertades políticas y derechos civiles, puesto que ya las hicimos anteriormente (las variaciones en este análisis son mínimas), y pasaremos a comparar las otras tres áreas restantes, colocando los cinco países según la puntuación anotada, empezando por el mejor y terminando por el peor.

Libertad de prensa:
Israel: 42.
Jordania: 91.
Líbano: 105.
Egipto: 127.
Siria: 131.
En libertad de prensa la calificación de Israel es la primera, a mucha distancia de su seguidor, Jordania, y a enorme distancia de los otros tres países.

Corrupción:
Israel: 23.
Jordania: 32.
Siria: 62.
Egipto: 68.
Líbano: 86.
Vemos que en cuanto a corrupción, nuevamente Israel ocupa el primer lugar, a cierta distancia de Jordania, y a mucha distancia de los demás.

Lugar democrático en el mundo:
Israel: 38.
Jordania: 89.
Líbano: 116.
Egipto: 122.
Siria: 126.
He dejado para el final este apartado del lugar democrático en el mundo a propósito, por su determinante importancia. El puesto de Israel en el mundo, en cuanto a democracia se refiere, es el 38, es decir un muy buen puesto cuando hablamos de compararse a todos los países del globo, y de nuevo el primero de los cinco. Jordania le sigue de muy lejos, y los otros tres países están a infinita distancia.

Hasta aquí los análisis.

Los números son farragosos, pero a la vez son fríos y poco manipulables. Los datos expuestos pocas veces salen a la luz. Pero son reales. De los cinco países que ocupan el territorio donde están Israel y sus cuatro vecinos fronterizos, Israel es merecedor de lo siguiente: es el único país verdaderamente democrático, es el único país donde se respetan las libertades políticas, es el país donde más se respetan los derechos civiles, es el país donde más se respeta la libertad de prensa, es el país donde menos corrupción hay, y es el país más democrático con diferencia de todos.

domingo, 2 de enero de 2005

Comienza la presión nacionalista

Hace pocas horas escribía yo sobre la debilidad en la que se encuentran el Presidente del Gobierno, el Gobierno en sí y el PSOE para afrontar la casi declaración de independencia del nacionalismo vasco. Me temía yo que esa debilidad podía ser muy mala consejera a la hora de tomar decisiones, sobre todo por las presiones que podían llegar desde ERC.

Pocas horas después se empiezaz a confirmar mis temores. Leo que ya desde ERC y desde CiU están llegando presiones a Rodríguez Zapatero, su Gobierno y su partido para que negocien lo constitucional, social y legalmente innegociable, la casi independencia de una parte de España.

Lo peligroso es que esas presiones no llegan desde cualquier parte, sino desde un partido que es uno de los que apoyó la investidura de Zapatero como Presidente, y que sustenta al actual Gobierno de España.

Es preocupante también que hasta ahora Zapatero no haya dicho nada sobre el asunto, y que las voces que llegan desde el PSOE nos hablen de agotar el debate político, En principio nada tengo contra esperar a la votación del nuevo Estatuto en las Cortes, para después, a la vista de las más que probables acciones ilegales del nacionalismo vasco, actuar en consecuencia. Aunque probablemente sería preferible atajar desde ya el acuerdo, impugnándolo ante el Tribunal Constitucional de acuedo al artículo 161.2 de la Constitución Española, como defiendel el PP, tampoco rechazo completamente la vía expresada por el PSOE de esperar a que el texto llegue a las Cortes Generales para ahí rechazarlo y esperar a ver que hace entonces el Gobierno y Parlamento vascos.

Aunque preferible, por su fortaleza, la vía del PP, la del PSOE no es desdeñable, ya que pondría al Gobierno Vasco en la tesitura, una vez rechazado el plan en el Parlamento nacional, de incumplir la Ley de una forma flagrante.

Lo que es muy preocupante es que el PSOE, entre este momento y el momento de la votación del nuevo Estatuto, pueda caer en seguir el camino marcada por el nacionalismo vasco, de entrar a negociar un plan rupturista en todos los sentidos (legal, territorial, socialmente, etc.), dándole así algún tipo de carta de credebilidad.

Me preocupa seriamente que el Gobierno y el PSOE puedan ver políticamente inconveniente seguir en este asunto los pasos marcados por el PP (los únicos posibles), y entre eso y las presiones de sus socios independentistas catalanes, al final, por culpa de la debilidad de Presidente, Gobierno y PSOE, nos veamos abocados como sociedad española a un abismo político y social.

La primera línea frente al reto nacionalista vasco

En mi anterior artículo hablaba del desafío que el nacionalismo vasco esta haciendo actualmente con la presentación de su nuevo Estatuto. Ahora quiero destacar que quienes tendrá que hacer frente a ese reto serán, por este orden, el Presidente del Gobierno, el Gobierno de la Nación y el PSOE.

Aunque intento ser optimista y positivo siempre (siempre que se puede, claro), la realidad es que ese optimismo y ese positivismo no los quiero convertir en puros juegos ilusionistas, que me aparten del sentido común. Y ese sentido común me hace suponer, me hace temer, que el futuro no es muy halagüeño en el tema tratado.

Tenemos un Presidente de Gobierno débil, que ante desafíos mucho más pequeños (trasvase de agua a Levante, defensa del valenciano, archivo de Salamanca), ha cedido sin ninguna oposición a las presiones nacionalistas de ERC. ¿Se atreverá ahora a atajar este problema con la toda la decisión que se necesita? Ojalá que sí. Pero el pasado no hace presagiar lo mejor.

Tenemos también un Gobierno nacional débil, que gobierna en minoría, y que se apoya, además de en su propio partido, en dos partidos antisistema, ERC e IU, independentistas y comunistas (¡ahí es nada!). Aunque IU ya ha adelantado que votará en contra del nuevo Estatuto de Ibarretxe cuando llegue a las Cortes (lo cual es en principio positivo), ERC no actuará del mismo modo. Y no solamente eso, sino que estamos iniciando una etapa en la que ERC pretende negociar su apoyo al Gobierno como un todo, intentando que las líneas maestras de la política española queden pactadas con ellos. Nada de eso es positivo para preveer que el Gobierno actuará sin vacilaciones en el presente momento.

Finalmente tenemos un PSOE totalmente dividido en la política autonómica. Ibarra y Bono son representantes de una defensa constitucional, mientras que Maragal y López son representantes de una vía de reforma constitucional que conduciría a la desmembración de España tal y como la conocemos hoy. Con el conflicto que tenemos sobre la mesa, me temo que las diferencias dentro del PSOE aflorarán, lo que hará que no tenga la fortaleza necesaria para acometer la tarea que tiene en frente.

El reto que tenemos frente a nosotros es el mayor de la etapa democrática. Y para acometerlo tenemos en primera línea a un presidente débil, a un Gobierno débil, y a un partido gubernamental débil. No son los mejores mimbres para hacer el cesto de la victoria que necesitan nuestra Constitución, nuestra democracia y nuestra legalidad.

El desafío del nacionalismo vasco

Me hubiera gustado comenzar este blog repasando en algunos artículos los principales acontecimientos del pasado año 2004. Por lógica, hubiera debido analizar el terrible atentado del 11 de Marzo. Posteriormente hubiera querido analizar las elecciones generales del 14 de Marzo, incluyendo las condiciones en que transcurrió la jornada de reflexión y las condiciones en que la ciudadanía se vio obligada a ir a votar. También habría que valorar los resultados salidos de esas urnas. Así como varias de las decisiones tomadas por el Gobierno elegido entonces a lo largo del pasado año. Todo ello quiero ir haciéndolo, poco a poco. Pero antes, por la magnitud política del tema, quiero empezar por desgranar algo de lo acaecido el 30 de Diciembre en el Parlamento Vasco.

La aprobación de un nuevo Estatuto Vasco, sin respetar las normas establecidas en la legislación vigente, es el mayor desafío del nacionalismo vasco. Un desafío a la legalidad vigente, ya que la incumple. Un desafío a la democracia en sí, ya que incumple los textos que democráticamente fueron aprobados, como la Constitución Española y el Estatuto Vasco de Autonomía. Un desafío a la unidad de España, contemplada claramente en la Constitución, y que el nuevo Estatuto quiebra. Un desafío a la soberanía del pueblo español, ya que el nuevo Estatuto contempla como vía final de solución la toma unilateral de decisiones. Un desafío a la misma sociedad vasca, la cual quedo cohesionada en torno al Estatuto de Autonomía, que fue aprobado por consenso, mientras que el actual Estatuto lo es solamente, en el mejor de los casos, de una parte de esa sociedad vasca, la parte nacionalista, y queda impuesto a la otra parte, la no nacionalista; ello divide a la sociedad vasca en dos partes prácticamente iguales en número, lo que resulta algo extremadamente peligroso cuando hablamos de algo tan importante. Un desafío a la unidad territorial vasca, ya que de seguirse la vía propuesta en el nuevo Estatuto no está garantizada la unidad de todos los vascos en torno a ese proyecto; más bien al contrario, todo apunta a que la provincia de Alava se desligaría de ese proyecto, camino que podrían seguir otros territorios, como, por ejemplo, determinados ayuntamientos.

En estos momentos, con este nuevo Estatuto, estamos viendo, como dije, el mayor desafío del nacionalismo vasco, en todos los frentes enumerados, y probablemente más aún. Es por ello que hay que tomarlo muy en serio. La democracia española tiene vías más que suficientes, apuntadas en la Constitución, para hacer frente a este desafío. Lo que hace falta es que nuestros dirigentes políticos, empezando por el Presidente del Gobierno, tengan la decisión de enfrentarlo, con todos los instrumentos que las leyes ponen a su disposición.

sábado, 1 de enero de 2005

El rincón de la libertad nace hoy

Estamos viviendo momentos realmente dramáticos desde el punto de vista político, en todo el mundo en general, pero muy en particular en España. En nuestro país a lo largo del recién acabado año 2004 han ocurrido tres acontecimientos que quiero destacar.
  • La masacre terrorista más grave de toda la terrible historia terrorista en España, el día 11 de Marzo, que se cobró 192 vidas humanas en Madrid.
  • El vuelco electoral contra todo pronóstico sucedido el día 14 de Marzo, dando al PSOE una victoria en las elecciones generales totalmente inesperada.
  • La aprobación por el Parlamento Vasco del llamado "Plan Ibarretxe" el día 30 de Diciembre, un nuevo texto estatutario que se opone frontalmente a todo el ordenamiento jurídico español, especialmente a la Constitución, siguiendo una vía secesionista.
Todo ello me ha movido a dar un paso al frente para, desde este pequeño espacio, expresar libremente mi opinión a partir de hoy sobre acontecimientos sociales o políticos, de todo el mundo en general, pero muy en particular de España.

La única base de este blog será una: la libertad. Libertad de pensamiento, libertad de expresión, libertad de decisión. Libertad económica, libertad religiosa, libertad política.

Tiempo habrá de ir analizando acontecimientos de la esfera nacional e internacional desde esta óptica de la libertad.

Hoy, 1 de Enero del 2005, nace el rincón de la libertad.