Dura poco la abundancia en casa del pobre, dice el refrán. Hace cuatro días (literalmente) que el huracán Laura sembró de devastación la costa de Louisiana, sin afectarnos por aquí (como dije, es el tercero del que nos salvamos en el área de Houston). Y ya tenemos cuatro áreas con posibilidad de desarrollar depresiones tropicales (que posteriormente casi siempre se transforman en tormentas tropicales y luego tienen la posibiñlidad -probabilidad en esta época de enorme calor- de convertirse en huracanes):
Y tres de ellas con posibilidades de dirigirse hacia nosotros (aunque, por supuesto, es muy pronto para pronosticar direcciones, cuando están en un desarrollo muy preliminar):
Menuda temporadita de huracanes que estamos pasando. Esperemos que en septiembre bajen las temperaturas, se enfríen las aguas y podamos estar un poco más tranquilos.
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