Hubo un tiempo en el que creí en la coherencia ideológica de la izquierda. Tal vez incluso, si no hubiera sido por mis convicciones morales y espirituales, me hubiera relacionado con algún partido izquierdista moderado. Hoy (bueno, desde hace mucho tiempo) he visto que esa coherencia ideológica es simplemente inexistente.
Que el catolicismo tiene determinados tintes machistas creo que es evidente. Pero igualmente de evidente es que esos tintes quedan en un mero juego de niños al lado del machismo en el islamismo.
Y no estoy hablando del islamismo más extremista, sino meramente del llamado islamismo “moderado”, en el que la religión le impone a la mujer una determinada forma de vestir, su posición es muchísimo más inferior que la del hombre y su voluntad está sujeta, de una forma u otra, a su padre mientras está soltera y a su marido cuando se casa.
Está también la humillante poligamia islámica, que, por supuesto, no tiene el contrapeso de la poliandria. O sea, un hombre puede tener varias esposas, pero una mujer no puede tener varios esposos. La desigualdad es evidente.
Podríamos seguir, apuntando también versos del Corán. Pero creo que no vale la pena. Pienso que en la mente de todo lector inteligente está más que claro que el islamismo (el “moderado”) es una religión machista. Mucho más que el catolicismo.
Pues llegados a este punto nos encontramos con que esa izquierda que critica e incluso se manifiesta públicamente, en algunos casos de forma hasta violenta, contra el catolicismo, a causa de su machismo, calla ante el islamismo, que, repito, tiene un machismo infinitamente mayor.
Alguien podría argumentar que eso es porque el catolicismo tiene una gran influencia en España. Pero es que el islamismo ya tiene esa influencia, y cada día va en aumento. Además, en las zonas donde son mayoría, esa influencia social es simplemente enorme, y quienes la sufren en mayor grado son precisamente las mujeres. Y, repito, la izquierda calla.
A ello podríamos añadir el silencio absoluto de esa misma izquierda ante los desmanes en países islámicos “moderados” contra la mujer.
Esa es la realidad. La izquierda ataca al catolicismo por su machismo, pero calla ante el islamismo con su machismo muchísimo peor.
Y lo dice alguien que, por si algún lector lo desconoce, no es católico, sino evangélico.
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