Acabo de terminar de ver el llamado debate a siete, entre los portavoces en el congreso de los grupos parlamentarios. Sin ser un debate de altura sí resultó mejor que el anterior, el cara a cara entre Sánchez y Feijóo. Un resumen rápido del debate, que fui escribiendo al finalizar cada bloque.
En el primer bloque, el de la economía, ganaron sin la menor duda el representante socialista y la de Sumar, quedaron decentemente los de Bildu, ERC y PNV, y se les vio fuera del tema el PP y Vox. El segundo bloque, el de las políticas sociales, fue ganado claramente por Vox, seguido por el PP, mientras básicamente los demás se peleaban entre ellos. En el tercer bloque, el de política territorial, extraordinario el de Bildu cuando sacó a colación las negociaciones de Aznar con ETA, muy bien el PP marcando que los indultos de los secesionistas fue un precio a pagar por Sánchez, y muy bien también Vox marcando los problemas de las autonomías así como genial sobre la libertad de en qué lengua se va a estudiar en las regiones donde Vox es parte del gobierno. Y en el cuarto bloque, el de los pactos, extraordinario el de Vox marcando que Sánchez ha pactado con terroristas, con separatistas golpistas y con comunistas, así como en el rifirrafe con el de Bildu; bien la representante del PP hablando de que quiere romper la política de bloques.
Un debate decente. Creo que lo ganó Espinosa de los Monteros, de Vox, que se mostró confiado y contundente, seguido de Aina Vidal, la representante de Sumar, que se mostró cercana, con un Patxi López, del PSOE en tercer lugar, bronco como siempre, y en cuarta posición Cuca Gamarra, del PP, nerviosa e insegura.
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