Para empezar, la edición de febrero de “Mujer Iglesia Mundo”, una revista mensual distribuida con el periódico vaticano L’Osservatore Romano, fue publicada el viernes. La revista del Vaticano para mujeres denunció los abusos sexuales contra monjas cometidos por sacerdotes y el consiguiente “escándalo” de las religiosas que debieron abortar o dan a luz a niños cuyos padres no reconocen.
He buscado por todas partes el mentando artículo en español, sin encontrarlo. Solamente lo he encontrado en italiano, así que lo he metido en el traductor de Google para conseguir su traducción al español.
Sinceramente, la denuncia me parece bastante light. Pero mi opinión parece no ser la misma que de la de los líderes vaticanos de L'Osservatore Romano, que es quien publica mensualmente la mentada revista Mujer, Iglesia, Mundo. Porque un par de meses después del citado artículo lo que pasó fue que todo el equipo editorial de la revista, con la fundadora y directora Lucetta Scaraffia a la cabeza, han presentado su dimisión. La renuncia se produce después de denunciar en un valiente reportaje los abusos que sufren las monjas a manos de sacerdotes y cardenales en la Iglesia, y la llegada de una nueva dirección al periódico vaticano.
Lo dicho, así trata la Iglesia Católica a los que desde el interior de la misma se atreven a a denunciar los abusos sexuales de una parte del clero. Y luego nos hablan de cambio y tal. Sí, ya.
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