El rincón de la libertad

domingo, 2 de enero de 2022

Energía nuclear: mientras la UE avanza las chicas (y chicos) comunistas de España pa'trás como el cangrejo

Bien por la Unión Europea, pues me entero de que la Comisión Europea reconoce
la energía nuclear como
verde al menos hasta 2045. Pero las (y los) comunistas que forman parte del
Gobierno de España, inasequibles al desaliento, dicen que no, que de
progreso nada, y que es
mejor el retroceso económico (como siempre vamos). Así tanto la chica, Yolanda, como el chico, Alberto, ambos comunistas en el Gobierno de España, dicen que nanai.

Los comunistas siempre contra todo desarrollo, tratando de que haya cada vez más pobres, que son su verdadero saco de votos. Nada nuevo bajo el sol, vamos. Con la única diferencia de que mientras en los países serios son unos apestados políticos, al mismo nivel que los nazis, en España están en el Gobierno de la Nación.

El PP al borde del abismo según el sondeo de 'El Español'

En el momento en que escribo este texto solo dispongo, por parte de El Español, de un artículo cuyo perfecto resumen es el título y la entradilla:

Vox, en su récord de intención de voto y escaños según el sondeo que esta noche publicará El Español. La formación de Santiago Abascal lograría el mejor resultado de su historia, mientras que el PSOE comería terrero al Partido Popular.

Pero en Electomanía he encontrado los datos, en los que se puede ver que la suma de PP y Vox se queda en 167 diputados, quedando incluso el PSOE por encima del PP por dos diputados.

Casado persiste en su guerra contra Ayuso, para consolidar su poder al frente del PP sin fisuras, y, para llegar a La Moncloa en las generales (que probablemente se convoquen para finales de este año o principios del próximo), lo fía todo a unos buenos resultados en las elecciones autonómicas de Castilla y León, ya convocadas, y de Andalucía, que todo apunta que se convocarán para justo antes del verano.

La anterior estrategia le puede salir bien, quedando al frente del PP sin oposición alguna y cómodamente instalado al frente del Gobierno. O le puede salir mal, no pudiendo llegar a Moncloa y, como consecuencia, teniendo que salir de la dirección del PP. O todo o nada. Un juego muy peligroso.