Contextualicemos un poco. Junio de 2014. Iván Espinosa de los Monteros es por aquel entonces secretario general de VOX. Un periodista le incluye en una lista de miembros de El Yunque. Pero Espinosa de los Monteros (quien desmiente ser miembro de El Yunque) se niega a demandarle (supongo que por calumnia o algo semejante).
Es la historia que nos cuenta en una sola frase el exmiembro de Vox Santiago Hernández de Andrés en un artículo en el blog liberal El Republicano Digital sobre dicho partido político.
De todos es conocida la facilidad con la que Vox pone demandas. Entonces, ¿por qué Iván Espinosa de los Monteros no lo hizo si consideraba, supongo, que esa falsa inclusión en una lista de miembros de El Yunque le dañaba su honor? Una pregunta que me hago.
Santiago Hernández de Andrés es uno de los muchos ejemplos de gente valiosa que Vox dejó escapar en Zaragoza, porque la directiva prefirió arrodillarse ante las artimañas de los Alzaraz boys. Santiago es un liberal de los pies a la cabeza que defiende sus principios con coraje y argumentos.
ResponderEliminarGracias por el dato. Evidentemente fue el proceso de radicalización de Vox, juntándose con todo aquel que pudiera hacerle avanzar algo.
EliminarAcabo de publicar sobre los resultados en Andalucía. No hablo de cifras. Prefiero incidir en lo que pocos inciden. Pásate a llerrlo cuando quieras. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por el dato. Lo he leído. De acuerdo por completo con el análisis. Destacable me parece el (estúpido) triunfalismo del PP. Con estos mismos números, pero traspansando 5 diputados de Vox a Podemos, al tal Moreno a estas horas le estarían buscando recambio en la planta séptima de Génova, 13. Otro abrazo.
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