"Dejemos de hablar del aborto y veamos cómo se apoya a la gente que quiere tener hijos".
Tal cual.
Pero era él quien no hace mucho hablaba del aborto. Tan cerca como el siete de febrero. Hace menos de un mes. Aunque parece una eternidad, Porque unos diez días después pegó un volantazo de aúpa. Y ahora lo confirma no queriendo ni hablar del tema.
El argumento en sí es una completa falacia que no resiste el menos análisis. ¿Y qué pasa con la gente que se queda embarazada pero no quiere tener hijos? La respuesta en el argumento de Casado es evidente. Que aborten.
Porque aquí el punto no es la gente que quiere tener hijos sino si el hijo no nacido tiene derecho a la vida o no. Pero en eso Casado no quiere entrar. ¿Por qué? Por una frase que cité en el texto enlazado anteriormente:
«¡Es que el aborto no nos da absolutamente nada!», enfatiza un dirigente de Génova.
Así que volvemos a lo mismo de Casado y su nuevo PP:
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