Ya traté el tema hace un par de semanas. Y nada, que siguen en sostenella y no enmedalla. Supongo que en medio de todo debe haber, como siempre, muchas miserias personales y mucha envidia. Y como no pueden ir de frente a por Inés Arrimadas, pues van de lado.
Aunque tampoco descarto que haya cuestiones aún más inconfesables. Inteligente, con personalidad, decidida, carismática, joven, bonita y mujer (vamos, como el Felipe González de los buenos tiempos, pero con un valor añadido para los tiempos que corren, que es mujer). O sea, todo un peligro, a derecha y a izquierda, si consigue remontar el vuelo. Así que tal vez desde muchos sitios están yendo a por ella, intentando aprovecharse de que está en su momento más débil.
Espero que aguante la guerra exterior y, sobre todo, la muchísimo más peligrosa, la guerra interna. Como en su día España necesitaba a Rosa Díez, hoy España necesita a Inés Arrimadas. A pesar de los pesares, es la única esperanza. Tenue sin duda, pero esperanza al fin y al cabo.
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