Ya he dicho por aquí que no me gusta nada el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky. Me parece un actor metido a político que sigue ejerciendo de actor; y
que ha mejorado, y mucho, sus dotes de actor desde que comenzó la guerra. Pero me gusta mucho menos Vladimir Putin, el presidente ruso. Me da la impresión de que es un asesino metido a político que sigue ejerciendo de asesino; y que también ha mejorado, y mucho, sus dotes de asesino desde que comenzó la guerra. Y entre un actor (muy actor, sin duda) y un asesino (muy asesino, también sin duda), no hay la menor duda en la elección. Me quedo con el actor, aunque no me guste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Después de siete días de la publicación de un artículo todos los comentarios necesitan aprobación.