El bocazas de la Casa Blanca dice lo que no debe y no hace lo que debería.
En cuanto a lo primero habla de que tal vez Estados Unidos podría intervenir militarmente en Venezuela. No lo hará, claro (la fuerza se la va por la boca a este payaso), pero si lo hiciera se equivocaría doblemente. Allá los venezolanos con sus problemas internos (¿por qué narices votaron comunismo vez tras vez, incluyendo a Maduro?).
Pero lo anterior no quita para que se haga lo que se pueda para que caiga Maduro y su cuadrilla. Y ahí el del pelo rojo podría hacer mucho y de forma simple. Sencillamente cortando la importación del petróleo venezolano en Estados Unidos (este país es el principal comprador, en torno al 40% de la producción del país sudamericano). Eso sería un golpe durísimo para la dictadura madurista. Pero no lo hace. Posiblemente por meros cálculos económicos y no políticos (EE.UU. también saldría perjudicado, ya que le supone creo que alrededor del 7% de su importación de crudo, aunque mínimamente en comparación con Venezuela). Con esa inacción Trump se convierte, por pasiva, en el principal apoyo real de Maduro (poderoso cabellero es don dinero, reza el dicho, y parece que Trump no quiere que le culpen de una posible subida de la gasolina, aunque no fuera exagerada y por un tiempo limitado).
Es triste tener en la Casa Blanca a un bocazas que solo sabe hablar y que no se atreve a actuar.
Cierto es que me parece mucho más grave cuando se proclama la necesidad de llevar a cabo guerras de agresión (un crimen según el Derecho Internacional) con la excusa de "proteger a la población civil" (principal víctima de cualquier bombardeo "protector", desde Yugoslavia a Yemen) pero también me parece preocupante y reprochable que haya personas que reclamen la necesidad de declarar la "guerra económica" (sanciones limitando el comercio internacional).
ResponderEliminarAl fin y al cabo, los principales damnificados de las sanciones que propone serían los enfermos de los hospitales que ya no accederían a los fármacos que se compran con las divisas reportadas por el petróleo, o los hambrientos que dependen de los alimentos racionados que reparte el gobierno ya que carecen del dinero para comprarlos en el mercado negro.
Eso de querer rendir por hambre y enfermedad a un país entero, o pretender instigar a la rebelión de los enfermos y hambrientos me parece aberrante. Ya puestos, es más rápido (y quizá cause menos víctimas) intervenir militarmente.
En ambos casos, son inmoralidades contraproducentes para la instauración de la democracia en Venezuela. Ahora, todo depende de que la insurrección popular y grupos de militares insurrectos logren derrocar al gobierno. Desde luego, la "oposición" formal que ya se prepara para las elecciones regionales no tiene nada que hacer. Ellos sí que legitiman al chavismo reconociendo sus instituciones.
El gobierno de USA debería abstenerse de hacer cualquier otra cosa que no detener a todo chavista que entre en su territorio (buen número de la cúpula militar bolivariana está reclamada por la DEA) o evitar que se transfieran a cuentas privadas los fondos públicos venezolanos que pueda haber en bancos estadounidenses.
El POTUS debiera mostrar algo más de seriedad al respecto y hacer honor a su promesa electoral de poner fin a la política exterior de "cambios de régimen":
http://ronpaulinstitute.org/archives/featured-articles/2017/august/14/attack-venezuela-trump-cant-be-serious/
Vale la pena destacar que sólo 5 representantes (entre diputados y senadores) hayan tenido la decencia moral de votar en contra de la extensión de la "guerra económica" global aprobada por las cámaras parlamentarias de USA, con el objetivo de torpedear la política exterior del POTUS. Entre ellos cabe señalar a los excandidatos presidenciales Sanders y Rand Paul (hijo del del citado Ron Paul)
ResponderEliminarEl establishment estadounidense contra el mundo
http://www.voltairenet.org/article197284.html