No ha lugar ni de lejos para la arrogancia que le escuché en RNE a Teodoro García Egea. Y es que el PP ha sido absuelto en en el caso del borrado de los ordenadores del extesorero de la formación Luis Bárcenas no porque se haya demostrado su inocencia, sino porque no se ha podido demostrar al cien por cien su culpabilidad, que es una cosa completamente diferente.
Cualquiera que haya estudiado un poco de Derecho sabe que una cosa es la verdad real y otra la verdad judicial. Pues bien, esa verdad judicial declara inocente al PP por falta de pruebas. Aunque la verdad real sea que es culpable. Al PP le salvó la campana del sistema judicial español enormemente garantista cuando estaba a punto de morder el polvo como partido de ser declarado culpable.
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