Los hechos que comentaba se remontan
a hace once y diez años. Alguien puede pensar que demasiado tiempo. Que los hechos han, por decirlo así, prescrito. Pero lo que no ha prescrito es el silencio sobre el asunto de este elemento en su blog, Contando Estrelas.
Hacía muchísimo tiempo que no me pasaba por ese blog de extrema derecha que se intenta hacer pasar por liberal (ciertamente es liberal en lo económico, pero ahí empieza y termina su liberalismo). Pues me he pasado para escribir este texto. Y he buscado dos conceptos: abusos sexuales (varios textos, pero ninguno sobre el tema) e Iglesia Católica (muchos escritos sobre la misma, pero solamente uno sobre el asunto que tratamos aquí, y no precisamente para criticarlo).
A este individuo se le puede acusar de muchas cosas, pero no desde luego de no estar informado. Por lo que el no haber dedicado desde la creación del blog, en 2004, ni un solo texto al tema de los terribles abusos sexuales a niños cometidos por determinados integrantes del clero católico y encubiertos sistemáticamente por la Iglesia Católica es evidente que ha sido y es una decisión de ignorar dichos hechos.
Es interesante el ataque que hace sistemáticamente en su blog al aborto (ataque con el que concuerdo completamente), mientras que no ha escrito ni una sola palabra contra los abusos sexuales a niños perpetrados por clérigos católicos y encubiertos sistemáticamente por la Iglesia Católica (silencio que, para empezar, se debe calificar como miserable). Parece que (acertadamente) le importa mucho la vida del no nacido, pero no le importa nada que una vez nacido abusen sexualmente de él clérigos católicos y que esos clérigos sean protegidos por la Iglesia Católica.
Este silencio sobre estos terribles hechos solo cabe encuadrarse en que este tipo, superinformado, critica en su blog únicamente los hechos que están en contra de su ideología (religiosa, política, social, etc.), mientras que deliberadamente ignora aquellos que son producidos por miembros de su bando, por aberrantes que sean dichos hechos. Ha dividido el mundo en dos partes, los nuestros y los otros, y mientras de los segundos crítica todo lo criticable, de los primeros silencia todas las canalladas, aún al nivel de la que menciono aquí, niños abusados sexualmente y sus abusadores protegidos. Así es Francisco Javier Prieto Ramiro, quien se esconde tras el apodo de Elentir.
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