Ya he mencionado por aquí el interesante tratamiento que le está dando Suecia a la crisis del coronavirus (uno y dos). Ahora leo de otro interesante caso que viola mucho menos las libertades individuales que la actuación de la mayoría de los países, el caso de Holanda.
Lo que más me ha llamado la atención del artículo es la popularidad del Primer Ministro de Holanda, Mark Rutte (en la foto), y el apoyo que el Gobierbo de este país tiene de sus ciudadanos, señal de que, en principio, no lo están haciedo nada mal.
Concuerdo con la conclusión del artículo. A día de hoy no sabemos cuales serán las consecuencias de estas decisiones. Ahora bien, lo que está claro es que el modelo de actuación de Holanda, como el de Suecia ya mencinado, viola mucho menos las libertades individuales que los aplicados en los países que han elegido la vía del confinamiento obligatorio. Y, otro punto importantísimo, sus medidas no impactarán, o lo harán mínimamente, la economía de sus paises (a diferencia de España, por ejemplo, donde el confinamiento obligatorio está hundiendo los mercados).
Recomiendo leer el interesante artículo con calma de principio a fin, sobre todo a los defensores de la libertad. Y, como con Suecia, habrá que estar atentos a los resultados finales de este camino de enfrentar la pandemia desde la responsabilidad individual y no desde la imposición colectiva.
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