Estoy convencido de que el aborto
es una tragedia, en la que se le da muerte a un ser humano. Pero, haciendo esfuerzos, consigo entender que para muchos
no sea así. De lo que también estoy convencido es que toda persona de bien debe pensar que, aunque tal vez el aborto no sea una tragedia, sí es un drama. Un drama, mayor o menor, para la mujer embarazada, que en principio tomará, por las razones que sean, una mala decisión (se supone que nadie quiere abortar) que considera que es la menos mala, porque todas las demás piensa que son peores.
Cualquier persona de bien, por lo tanto, querría, pensando en las mujeres, que no tuvieran que llegar a tomar esa decisión de abortar, por medio de poner las medidas necesarias para no quedarse embarazadas o teniendo el hijo si ya lo están. Repito, no por la vida del feto, sino simplemente por ahorrarle el drama del aborto a la mujer embarazada.
Pues parece que eso no va con esta gente que gobierna España. Leo mucho sobre libertad sexual y demás, pero hace muchísimo tiempo que no leo nada sobre métodos anticonceptivos. Es decir, que se están promocionando unas actividades que llevan de cabeza a una inmensidad de embarazos no deseados. Y cuando llega ese embarazo no deseado parece que lo que los gobernantes quieren es que se produzca el aborto. Ni tan siquiera desean que la mujer embarazada tenga la opción de saber lo que lleva en su vientre, a través de la tecnología existente.
Pareciera que lo que desean es que cuanto más abortos, mejor. Pasando por encima de la vida del no nacido, pero también de la libertad de la mujer embarazada para tomar la decisión, la que sea, con toda la información en su mano.
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