Extraño que un adicto a las encuestas como yo diga la frase del título. Y más después de haber publicado ayer la supermedia de todas las encuestas para las elecciones generales.
Pero es que las encuestas, sobre todo antes de la convocatoria electoral, tan solo muestran una foto fija del momento, que por supuesto va a cambiar con el tiempo y con las circunstancias políticas que vendrán.
Y en estos momentos las encuestas para las elecciones generales, que se deberían celebrar en diciembre, con unos comicios locales y autonómicos en mayo, no sirven para nada. O casi, porque siempre marcan una cierta tendencia. Pero esa tendencia se va a ver muy alterada, en un sentido o en otro, por esos resultados primaverales. Si la suma de PP y Vox arrasa, arrebatando mucho espacio al PSOE, las encuestas posteriores para las generales se inclinarán, probablemente de forma decisiva, en esa dirección. Por el contrario si es la suma de PSOE más UP (o lo que sea) la que gana, será lo opuesto.
Por eso no es descartable que Pedro Sánchez se decida a convocar las generales con las autonómicas y municipales. O tal vez antes. Pero esa es otra historia.
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