En el primer aniversario del asalto al Capitolio por seguidores de Trump, leo que el presidente estadounidense responsabiliza a su predecesor y a su “ego herido” del asalto al Capitolio. Y tiene toda la razón. Trump se negó a aceptar los resultados electorales y tiró por la vía violenta, con el resultado conocido. Lo que no entiendo es por qué no está en la cárcel por ello.
Y también leo que Trump ha respondido que Biden "usó mi nombre hoy para tratar de dividir aún más a Estados Unidos" y que "este teatro político es solo una distracción para tapar su fracaso". Y también tiene toda la razón. El fracaso del tándem formado por Joe Biden y Kamala Harris es evidente, y Biden está usando el recuerdo del asalto al Capitolio en su favor, para que la gente olvide su incompentencia política, y para ello no le importa lo más mínimo dividir aún más a los estadounidenses.
Así están las cosas en Estados Unidos. Como se las gasta Trump es de sobra conocido. Pero ahora también sabemos como se las gasta Biden. Triste.
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