Tras las palabras de la ministra de Justicia los que tuvieran algo de dignidad deberían dimitir

La titular de Justicia ha puesto como ejemplo el hecho de que el robo con violencia o intimidación «esté castigado con 2 a 5 años de prisión y la agresión sexual con violencia, con una pena
de 1 a 4 años». «¿Desde cuándo vale más la propiedad en nuestro país que la integridad sexual de la persona?».

Me ha costado creer que de verdad había dicho eso la ministra de Justicia. No es la única perla del artículo, pero en mi opinión es la más destacable.

¿No habían hecho antes de aprobar la ley esa comparación? ¿Para eso tienen no sé cuantos órganos de estudio de los anteproyectos de ley? ¿Ningún juez de los que tienen en el Consejo de Ministros (creo que son tres, Robles, Marlaska y la propia Llop) cayó en ese detalle?

No tengo ganas de buscar los tiempos, mas creo que llevan en esto de la ley del solo sí es sí desde el principio de la legislatura, pero, si les damos un año para que se rodaran, tuvieron un año y ocho meses hasta su aprobación definitiva. ¿Para esto? ¿Para ahora tener que decir que, según la ley, y en palabras literales de la propia ministra de Justicia, salga más barato agredir sexualmente a una mujer con violencia que robar?

A lo que hay que añadir que la ministra ha reconocido que «ha sucedido algo muy grave» con la rebaja de penas a «personas condenadas por unos delitos que la sociedad rechaza absolutamente, muy sensibles y muy viscerales». ¿Y para eso hay un Gobierno en España, con 801 asesores? ¿Para producir una ley que rebaja las penas a violadores y pederastas condenados, excarcelando a un buen número de ellos? ¿Y no va a pasar nada? ¿De verdad?

Si yo formara parte de este Gobierno, después de esas palabras no podría volver a sentarme en un Consejo de Ministros. Me iría por vergüenza torera. O por mi culpa o, si no la tuviera (no se puede culpar, por ejemplo, a la ministra de Ciencia de este desaguisado), por no querer compartir un órgano colegiado con los que defendieron una decisión tan terrible. Pero nadie del Gobierno se irá. Hablamos de un Gobierno sin la menor dignidad. Ni como grupo ni individualmente.