Una de las razones que me hizo ser seguidor del Real Madrid es que en dicho club, a diferencia de, por ejemplo, el Barcelona, la estrella de turno no marcaba el ritmo del baile, sino el entrenador. No recuerdo quién ni por qué, pero hace muchos años (muchos, muchos) un entrenador sentó a la estrella del equipo por un problema de disciplina (creo que porque faltó a un entrenamiento). La humillación de ser suplente en un partido, sentando en el banquillo ante todo el público, le hizo aprender la lección.
Parece que, aunque no tenga nada que ver, igual que el Barcelona se cree más que un club, Ronaldo se cree más que un jugador. Y piensa que está por encima del equipo, como lo demostró en sus estúpidas declaraciones personalistas de Kiev, centrando todo en sí mismo y no en que el Real Madrid había ganado su decimotercera Copa de Europa.
Bueno, pues adiós. Tanta paz lleve como descanso deja. Le deseo que sigan sus éxitos sin el Real Madrid. Que el Real Madrid seguirá con los suyos sin Ronaldo.
No soy futbolero,pero se lo que es el futbol y la actitud de ese niño de teta con cuerpo de adulto,hacia presagiar esto.Menudo estercolero como persona.
ResponderEliminaresta claro que dios le da pan al que no tiene dientes
ResponderEliminarsoy cule y prefiero mil veces la despedida de cristiano, alli van 3 champions y adios, dejando 100 kilos, que la lacrimogena interminable sensiblera y absurda despedida de iniesta
magnificada histrionica e histerica en su forma por bartomeu para no hablar de la chanpions de basket y futbol del mandril
x cierto cristiano un ninyato etc y lo que tu quieras pero un profesional como la copa de un pino que se ha cuidado y del que muchos en el barsa con menor edad y lamentable estado de forma deberian aprender