Como era totalmente previsible los democrátas aprobaron con su mayoría el impeachment contra Donald Trump en la Cámara de Representantes. Como igual de previsible es que los republicanos lo tumbarán
con la suya en el Senado.
Los demócratas ni tan siquiera han conseguido ganar la batalla por la opinión pública, con un virtual empate (la diferencia es de un punto a favor de los que apoyan el impeachment) entre los que están a favor y los que están en contra de sacar de la Presidencia a Trump.
Pero es que si vamos un poco más allá, las encuestas por la elección presidencial (que, recordemos, tendrá lugar en diez meses y medio) dan otro virtual emparte entre Trump y el favorito en las encuestas de los demócratas, Biden.
¿Los hechos en lo que se basa el impeachment? Poco o nada importan. Aquí lo importante es la batalla por las encuestas. Y esa batalla por ahora está empatada. Qué siga el espectáculo.
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