Vía Elentir llego a la noticia de un hombre que ha sido condenado a muerte por convertirse en musulmán, y de otro que está en la cárcel por el mero hecho de dar un Corán a otra persona. La carta del primero pone los pelos de punta. Así están las cosas es lo países cristianos, donde se persigue, encarcela y condena a muerte a personas tan solo por el hecho de abandonar la fe cristiana y convertirse en musulmanes. Por desgracia, como dice Elentir, esto no es importante, y lo importante es que un clérigo musulmán amenace con la quema de Biblias, ante lo cual el mundo protestó enérgicamente (incluido el gobierno español), hasta que el clérigo musulmán desistió de su actitud.
Nota: Sí, ya sé que he cambiado algunos términos. Pero es para intentar que veamos de una puñetera vez las auténticas barbaridades que están cometiendo esta gente, y ante las que estamos anestesiados.
Estos son los valores de la izmierda que padecemos.
ResponderEliminarDesde su superioridad moral y cultural han decidido que esto esta bien, y esto es lo que hay.