Una joven, casi desnuda y con los senos al aire, es paseada a hombros por un joven, mientras todos los demás intentan tocar lo que pueden. La escena es de sobra conocida y se ha repetido en las fiestas de San Fermín, en Pamplona, este año. La novedad ha sido que los politicos españoles, mayormente los de izquierda, se han rasgado las vestiduras por ello.
No seré yo quien defienda la escena relatada. Aún menos si la chica no desea que la manoseen. Pero, me pregunto: ¿Quiénes llevan mas de 30 años (desde 1982) promoviendo un desarme moral que ha llevado a esto? ¿Qué esperan que pase cuando una joven, probablemente borracha, es paseada y casi ofrecida a jóvenes igualmente borrachos? Esta es la juventud que ellos han formado, como dije, desde hace 30 años. Y ahora no les gusta. A mí tampoco.
¿La solución? Pues que la joven, si se sintió agradida, presente la correspondiente denuncia (y tampoco pasará nada, porque España ha dejado de ser un estado de derecho, pero ese es otro tema).
Pero que esta gente de izquierda clame contra algo que ellos mismos han creado, a la vez que, además, callan ante las terribles injusticias que sufren las mujeres musulmanas, me merece un solo calificativo: Hipocresía, una gran hipocresía.
¿Y qué es el feminismo, sino un discurso sexista (no de carácter machista, sino hembrista) de manipulación de la mujer?
ResponderEliminarPablo el herrero
De acuerdo con el artículo, pero vamos, que digo yo que después de despelotarse y subirse de aquella manera, cuando ya es algo que se ha convertido en habitual en los últimos años en esta fiesta, que la niña se sorprenda de que le toquen los pechos, pues da una indicación de su nivel intelectual.
ResponderEliminarNunca está de más recordar aquella definición del puritanismo: el miedo a que alguien, en algún momento, se lo esté pasando bien.
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