"Los momentos en los que podíamos confiar plenamente en los demás, en cierta medida, terminaron. Lo experimenté en los últimos días y, por lo tanto, sólo puedo decir que los europeos tenemos que tomar nuestro destino en nuestras propias manos. Tenemos que saber que tenemos que luchar por nuestro propio futuro y nuestro destino como europeos."
No puedo estar más de acuerdo con las famosas palabras de Angela Merkel. Nos hablan de dignidad frente a Estados Unidos. Igual que la actitud de Macron ante Putin nos habla de dignidad frente a Rusia. Es hora de que los europeos decidan que quieren ser y luchen por ello. Hoy no hay una peligrosísima Unión Soviética a las puertas. Está claro que la actual Rusia de Putin es un peligro, pero mucho menor que en el antiguo gigante comunista. Y la salida del Reino Unido de la Unión Europea, que siempre estuvo a medias dentro de ella, puede ayudar a estrechar los lazos de los que siguen dentro, si se sabe aprovechar la ocasión.
Pero la dignidad y la independencia tienen un costo, normalmente alto. La Unión Europea debería tal vez pensar en una refundación, a través de fuertes cesiones de los países que la integran y de la elección de un Gobierno Europeo por sufragio directo de los ciudadanos, un gobierno con las mayores competencias posibles. Sería hora de pensar en la posibilidad de que, a largo plazo, desparezcan esos gobiernos nacionales (y regionales) y tener un solo gobierno y un solo parlamento. Así como una sola legislación y una sola Justicia. Y una sola política fiscal. Unas solas Fuerzas del Orden Público y un solo ejército. Convertir a la Unión Europea en una nación, con todo lo que ello implica. Y eliminar todos esos gastos inútiles que son todos esos gobiernos, parlamentos, funcionarios y demás. Y de paso hacer desparecer también toda la burocracia en todos los campos.
¿Es todo eso imposible? Puede ser. Casi seguro. Hay demasiados intereses creados, demasiados señores feudales (nacionales, regionales, locales) que no quieren perder su poder, que prefieren ser cabeza de ratón antes que cola de león. Pero si la Unión Europea no camina hacia una mayor integración de la mano de una verdadera democracia, basada en sus ciudadanos, hacia donde caminará será hacia su desaparición, la cual llegará más tarde o más temprano. No creo que a largo plazo haya término medio. O unidad total o desintegración absoluta.
Tenga cuidado con lo que propone porque parece que ansía una especie de República unitaria paneuropea socialdemócrata o directamente socialista, en vista a la centralización política que propugna.
ResponderEliminarLo cierto es que en Europa, a lo largo de su Historia, han surgido y se han disuelto multitud de Estados y sistemas políticos que, como si de un ecosistema se tratara, ha operado cierta "selección natural" purgándose los sistemas más disfuncionales y desapareciendo los Estados que peor operaban. El desarrollo de Europa, en resumen, puede explicarse como un resultado de la libre y anárquica competencia institucional entre una multiplicidad de Estados enfrentados entre sí.
Semejante unión que propone supondría maniatar a los actuales Estados-Nación sometiéndolos a un gobierno único que sería ilegítimo para una gran parte de la población (al menos la consciente de lo que ello implica).
Partamos del hecho de que en Europa no existen democracias formales, salvo en Suiza y quizá parcialmente en Francia. El resto son partidocracias, Estados en los que la acción política reside en las oligarquías partidistas que, para mayor abominación, se nutren de los impuestos que sufragan los súbditos fiscales. De semejante poder oligárquico no cabe imaginar que surja nada democrático. Ese hipotético Estado único Europeo se parecería más a la Unión Soviética que la los USA. De hecho, nada indica que la ideología de la que beben los eurócratas, un cóctel agrio de fabianismo, nihilismo socialdemócrata y monetarismo neoliberal, esto es, lo que algunos llaman globalismo, vaya a dar lugar a un sistema político que reconozca la representación de la nación a través de diputados de distrito e instaure la separación de poderes dentro del Estado.
Creo que se deduce que todo liberal (entiéndase clásico, que son más bien pocos), que recela de toda concentración de poder, aborrecería de una propuesta tal como la que expone. Incluso los democristianos italianos y ordoliberales alemanes de la inmediata postguerra mundial rechazarían de plano semejante ensoñación. De Gaulle incluso habría encabezado la lucha por la libertad de Francia.
Lo cierto es que el avance institucional europeo se ha chocado repetidamente con negativa populares en diversos referenda como los casos danés, francés, holandés, irlandés, griego y británico. Actualmente, aunque agradecen los euros y los empleos deslocalizados procedentes del occidente europeo, países como Hungría y Polonia recelan o abiertamente se enfrenta a la autoridad de Bruselas, que emana directamente de Berlín. Que las naciones políticas realmente existentes puedan disolverse y constituir una "nación" paneuropea es igualmente una elucubración irrealizable. Otra cosa es que se pretenda en muchos Estados, verbigracia España, la liquidación nacional por la vía de fomentar regionalismo. Esta estrategia de resucitar servidumbre neofeudales lleva décadas en funcionamiento y por lo que se ve, beneficia a la oligarquía dominante en la actual UE, la gran coalición germana, dirigida por la gobernanta Merkel.
Enlaces de interés:
ResponderEliminarLa régionalisation et l'aménagement du territoire en Europe : une révolution politique en faveur d'un partenariat transatlantique ?
par Pierre Hillard, spécialiste de l'Allemagne
https://www.diploweb.com/forum/hillard2.htm
El Neofeudalismo
Santiago Javier Armesilla Conde
http://www.nodulo.org/ec/2008/n072p12.htm
Por cierto y en otro orden de cosas, ¿en qué idioma se desarrollarán los debates electorales?
ResponderEliminarYo creo que se podría aprovechar la oportunidad para crear una nueva Unión Europea, justa, democrática, liberal y con una separación real de poderes (para empezar).
EliminarY para los debates tenemos los traductores.
La oportunidad a la que alude está condicionada a destruir antes las partitocracias que actualmente integran la UE, sin cuya liquidación no tiene sentido (y además es imposible) cualquier democracia formal en Europa.
ResponderEliminarY en caso de que semejante logro, hoy en día tremendamente difícil, no cree que sería más plausible y viable consolidar esas hipotéticas instituciones democráticas dentro del margen de los Estados-Nación realmente existentes que intentar coaligar a los distintos pueblos europeos que, para empezar, no se entienden.
La URSS, que como esa hipotética República Unitaria Paneuropea que ha descrito, reconocía infinidad de lenguas cooficiales, pero lógicamente, la lengua del gobierno era el ruso dado que la élite gobernante era rusa. Acaso en esa futura República Unida de Europa no será el alemán la lengua de la élite gobernante.
EEUU funciona, entre otras cosas, porque la casi totalidad de los nacionales habla el mismo idioma, esto es, inglés(supongo que habrá núcleos de inmigrantes no naturalizados que viven en comunidades bastante cerradas con conocimientos mínimos o nulos del idioma, en los países europeos me consta que también).
Realmente cree que puede convertirse a la UE en una "nación" sin uniformizar paralelamente el idioma de sus nacionales. Bastantes conflictos genera el tema lingüístico en España como para minusvalorar el problema de la lengua.
Vuelvo a lo mismo, creo que se podría hacer, desde un punto de vista justo, liberal y democrático, haciéndolo desde abajo hacia arriba y no al revés, dando el poder a los ciudadanos.
Eliminar...Para lo que es imprescindible derrocar las partidocracias europeas, UE incluída, y tras un período de libertad constituyente instaurar Repúblicas constitucionales en los Estados-Nación realmente existentes que, siempre con los referenda oportunos, podrían coaligarse entre sí estableciendo acuerdos justos.
EliminarRealmente, el papel del liberalismo vendría después de establecer las reglas de juego, como una ideología más, con todas sus incoherencias, disputando las jugadas de la política nacional. Poner al mismo nivel imperativos básicos como la justicia, que el diseño institucional sea democrático (por otra parte, término tremendamente prostituido) y que el sistema sea "liberal" implica no tener claras las prioridades, máxime cuando el liberalismo político vigente es la excusa ideológica que ampara la agenda globalista.
A mí me gusta denominarlo neoliberalismo para distinguirlo del liberalismo clásico, prácticamente inexistente entre la clase política y poco difundido entre la sociedad civil.
Igual si Alemania se rearma y deja de depender de USA entonces Europa no tendrá que admitir inmigración masiva musulmana impuesta por USA (Obama, Clinton) según órdenes saudíes.
ResponderEliminarTodo puede pasar. Yo sí creo en una Unión Europea independiente de Estados Unidos y de Rusia que defienda sus propios intereses. Pero también asumiendo su defensa militar y los costos que ello implica.
EliminarYo incluso creo en una España como República constitucional independiente y orgullosa de la Hispanidad. Liberada del vasallaje al Imperio de los USA y del sometimiento a Alemania, integrada en una comunidad europea de Estados Nación soberanos y que sirva de puente entre Hispanoamérica y Eurasia.
ResponderEliminarPuestos a soñar y como soñar es gratis...