La afirmación del progrerío patrio de que la pornografía está siendo la escuela de la sexualidad de jóvenes e incluso niños y que la misma está provocando que tomen a las mujeres por objetos, lo que a su vez les está animando a violarlas, es de manual. Ya he dejado claro por aquí que fueron los socialistas los que trajeron el porno, porque en aquellos tiempos era lo más guay. Hoy, claro, vistas las consecuencias ya no tanto.
Pero, ¿cuál es la solución? Nos cuentan que enseñar a jóvenes y niños una asignatura llamada educación afectivo-sexual. Algo que, visto como se las gasta esta gente izquierdosa, lo mas probable es que caiga casi en el delito de corrupción de menores. O sin el casi.
¿Qué pretenden? ¿Apagar el fuego con gasolina? ¿Intentar bajar el número de violaciones animando a jóvenes y niños a tener relaciones sexuales? Es algo simplemente estúpido. Tendrá que pasar otra generación de estudiantes (diez, doce o catorce años, que se dice pronto) para que se demuestre la equivocación. Y para que los que propusieron la solución no asuman el error, por supuesto.
¿Y entónces? Aún recuerdo cuando aparecieron los ordenadores y se escuchaba y leía el mismo consejo por todas partes: mantengan el ordenador en la sala o en el comedor de la casa, para que todos puedan ver lo que los jóvenes observan en internet. Era el supuesto modo de evitar que miraran pornografía. Hoy, con cada joven y niño con un teléfono móvil, eso es imposible. La pornografía está al alcance de todos en cualquier sitio.
¿Hay solución? Sí, la hay. Y no es la educación afectivo-sexual. Es que los gobiernos de los países civilizados lleguen al acuerdo de que las páginas que ofrezcan pornografía estén obligadas a tener un sistema que impida a los menores de edad acceder a ellas. Y las que no lo tengan que sean cerradas y sus responsables perseguidos penalmente. No soy ingeniero informático, pero estoy seguro de que se puede hacer. Lo que hace falta es la voluntad. Y que alguien defienda la medida a nivel internacional.
Evidentemente la pornografía siempre estaría al alcance de los jóvenes y niños que hicieran esfuerzo por encontrarla. Como hoy en día está la pornografía infantil al alcance del que haga ese esfuerzo. Pero la medida eliminaría el acceso a la pornografía con toda seguridad de al menos la mitad de los menores de dieciocho años. Probablemente mucho más, tal vez entre el 75 y el 90%.
¿Qué es muy difícil? ¿Qué es algo prohibicionista? ¿Qué suena ridículo? Pues bueno, pues vale, habrá que seguir perdiendo una generación de niños y jóvenes tras otra. Y ver como aumentan la cantidad de violaciones, con violadores adultos, jóvenes e incluso niños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Después de siete días de la publicación de un artículo todos los comentarios necesitan aprobación.