Juega fuerte la jerezana. Y arriesgado. Pero el que no arriesga no gana. Sabe que Sánchez va a seguir en su terquedad de buscar marxistas, sediciosos y nacionalistas. Y Casado en la suya de un nuevo no es no, porque de lo contrario Vox se lo merienda con patatas. Así que busca la líder naranja intentar conquistar el voto moderado del PSOE y del PP.
Como dije, es arriesgado. Algunos pueden pensar que se está acercando demasiado al PSOE y huir hacia el PP. Pero supongo que parte de la base de que todo lo que Cs iba a perder por el flanco derecho ya lo perdió, cuando Rivera ofreció su apoyo a Sánchez en los últimos momentos de la pasada legislatura. Así que ahora intentar crecer, ensanchando el espacio centrista, más por la izquierda que por la derecha, al menos en este momento.
Si, como todo apunta, Sánchez consigue sacar adelante su investidura apoyándose en todos los partidos que quieren destruir España, Arrimadas se habrá cargado de razón y le dirá una y mil veces que ella le dio una oportunidad y él la rechazó. Y si hay que ir a terceras elecciones, podrá decir que intentó una salida al bloqueo político.
¿Le saldrán bien este tipo de jugadas a largo plazo? No lo sé. Pero lo que está claro es que o arriesga o se la comen.
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