Falacias vacías, sin argumentos de sentido común posibles. Aldeanismo puro y duro. Mirarse el ombligo. Demagogia nacionalista en estado puro.
No cierran de una buena vez su visión de "yo contra todos y contra todo", para por fin arrimar el hombro y todos juntos trabajar. Solamente se trata de explotar "el hecho diferencial" para querer salirse con la suya, aunque sea a todas luces ilegal.
Así no hay manera. Lo siento, pero soy pesimista. Me parece que hay muy poquito que hacer con esta gente, y con la dirección que llevan. La cosa podrá terminar mal o peor, pero no va a acabar en bien.
La cosa podría terminar bien si alguien se propusiera haceerles cumplir la ley sí o sí, es decir: aplicándoles el código penal cuando incumplen las sentencias.
ResponderEliminarEs una ley no escrita que estos señores que una vez ayudaron a empezar una guerra en la que fueron derrotados, tienen un poder que emana no se sabe de donde, pero que hay que respetar por no se sabe que razones.
ResponderEliminarRecapitulando, de la dictadura brotan el CDS, el PSOE, AP y algún otro, del exilio aparecen el PC y algunos grupusculos nacionalistas el PNV, ERC...
Entre Adolfo I el torpe y el PSOE conceden en la constitución al parecer con la colaboración del rey un poder en la practica desmesurado a estos derrotados nacionalistas, por un sentimiento de resarcir no se que daños pasados. En esta operación se asume que los depositantes de este poder lo ejercerán con responsabilidad. (JE!)
El Rey, convencido de que Adolfo es torpe, apuesta por el PSOE convirtiendo a este a lo largo de los años en el nuevo régimen legitimo.
Y así llegamos al 2011 con un rey de 73 años incapaz ya de controlar a los monstruitos que ha creado.