"Hicimos todo lo que el mundo nos pidió: desmantelamos los asentamientos, el Ejército se retiró, dejamos toda la Franja e incluso les dejamos 3.000 invernaderos para que empezasen a construirse una economía. Demolieron todos los invernaderos. Construyeron campos de entrenamiento para la Yihad islámica y para Hamás. Y desde entonces han lanzado más de 1.500 misiles sobre los ciudadanos israelíes."
Son palabras del político centrista israelí Yair Lapi en una entrevista de la que ya me hice eco por aquí. Las recupero en particular porque muestra la actitud de Israel y de Hamas hacie el llamado conflicto palestino-israelí. Por una parte los israelíes hicieron todo lo que puderion para alcanzar la paz (las imágenes del ejércíto israelí obligando por la fuerza a evacuar a los colonos israelíes fueron dramáticas). Por otra parte, los palestinos de Gaza optaron por la violencia gratuita (destruyeron todo lo que los judíos dejaron, incluidos los invernaderos que menciona Lapi; todo muy civilizado, por supuesto), y prefirieron centrarse en atacar a Israel que en construirse un futuro para ellos y para sus hijos.
Así están las cosas en Israel y en Gaza respectivamente. Las palabras de Golda Meir, pronunciadas hace casi medio siglo, siguen teniendo, por desgracia, plena vigencia: “La paz llegará cuando los árabes amen a sus hijos más de lo que nos odian a nosotros”.
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