Si hay un caso verdaderamente claro de falta de democracia y de apaño partidocrático a espaldas de los ciudadanos, es el caso del gobierno balear después de las autonómicas del pasado año.
He aquí los resultados:
Partido Popular - AIPF  Jaume Matas 193.286 46,44% 29 
P. Socialista Obrero Español - GxF  Francesc Antich 114.575 27,53% 16 
Bloc per Mallorca   Gabriel Barceló 37.455 9,00% 4 
Unió Mallorquina  Maria Antònia Munar 28.082 6,75% 3
PSOE - Eivissa pel Canvi    Xico Tarrés 19.008 4,57% 6
P.Socialista de Menorca-Verds  Eduard Riudavets 3.326 0,80% 1
Si las matemáticas no fallan, la mayoría absoluta quedaba cifrada en 30 diputados, es decir que el PP se quedó a solamente 1 de ella, con más de un 46% de los votos. Pues bien, los otros cuatro, cinco o seis partidos (no recuerdo el enrevesado sistema de colacionoes) se unieron, dándole la Presidencia al socilaista Francesc Antich. Es evidente que quienes democráticamente debieron tomar esa decisión fueron los electores, decidiendo en una seguda vuelta entre Francesc Antich y Jaume Matas. Por lo tanto, esta elección merece el color rojo de totalmente antidemocrática.
España, partidocracia (serie)



 
Una segunda vuelta supondría una mejora del sistema pero, en Baleares, todo el mundo sabía que el PP sólo gobernaría si obtenía la mayoría absoluta.
ResponderEliminarAún así, muchos votantes tradicionales populares, optaron por quedarse en casa y no votar. ¿Por qué? Porque la partitocracia va más allá de unas elecciones concretas y estaban hasta las narices de que el PP en Baleares llevara políticas cercanas al nacionalismo. ¿Cómo dijo Zapatero? Que triunfen sus ideas gane quien gane las elecciones.