Un buen amigo de este blog, Mike, ha mostrado en su blog y en éste su inquietud por cuales serán las decisiones de Obama en un tema tan importante, para Mike y para mí, como es el del aborto.
Yo expresé hace tiempo mi opinión sobre el aborto en sí mismo y sobre la relación de Obama con el aborto. Básicamente su posición en este tema es lo que hacía que personalmente hubiera preferido que quien ganara fuera McCain y no él. Pero ha quedado claro que la mayoría de los estadounidenses no tienen la misma visión que yo del asunto, y quien hoy está en la Presidencia de los Estados Unidos es Barack Obama.
¿Qué va a hacer Obama, por lo tanto, en el tema del aborto? Bueno, mucho me temo que, por desgracia, una sola palabra: Nada. Porque la cosa esta tan mal, pero tan mal, en esta cuestión en Estados Unidos que para que siga igual lo único que hay que hacer es no hacer nada. Hace tiempo escribí sobre ello en este blog, mostrando mi pesimista visión en un artículo que se convirtió en pequeña serie con las contestaciones a los comentarios (uno, dos y tres), si bien posteriormente hubo una buena noticia al respecto, aunque bastante pequeña.
En resumen, el poder para legislar sobre el aborto (aunque bastante restringido) está en los estados, y las herramientas que tiene el Gobierno federal para luchar contra él son muy limitadas, como se demostró durante la Presidencia de Bush, el cual a pesar de luchar contra el aborto no pudo conseguir una victoria mínimamente en condiciones. La decisión de considerar el aborto como un "derecho" de la mujer la tomó el Tribunal Supremo, y revertirla va a tomar mucho tiempo y muchos esfuerzos. Por desgracia, es lo que hay. Habrá que esperar, por lo tanto, a que un republicano vuelva a ocupar la Casa Blanca para seguir con esa lenta lucha por la vida del no nacido.
¿Y mientras tanto? Pues lo dicho, Obama no hará nada a favor del aborto, porque ese terreno lo tienen ganado los proabortistas, y son los que están a favor de la vida los que tiene que dar la batalla, por muy difícil que sea, que efectivamente lo es.
Así que no me queda sino desearle a Obama lo mejor en su Presidencia, por el bien del mundo en general y de Estados Unidos en particular. Y, por supuesto, seguiré haciendo con él lo mismo que he hecho con cualquier otro gobernante, alabar lo que considere correcto y criticar lo que considere desacertado. Y lo uno no impedirá lo otro. De incondicionalismos, ni a favor ni en contra, nada de nada.
Precisamente en nuestro blog escribimos sobre el bochornoso espectáculo de ZP abrazado a una joven con síndrome de Down. La pregunta que debía haberle hecho: "¿Por qué usted impulsa leyes que permiten a las madres librarse de personas como yo antes del nacimiento y no de personas como usted?"
ResponderEliminarhttp://vidrierairrespetuosa.blogspot.com
Gracias por citarme!
ResponderEliminarEsperemos que se imponga la cordura y se respeten los derechos del no nacido.
En cuanto a la pregunta de Zuppi, es muy, muy interesante. Qué debería responder a eso un proabortista???
En esta sensible cuestión que afecta a los principios más elementales, yo comparto los puntos de vista de los presidentes de los EEUU y España: bajo ningún concepto se puede meter a una mujer en al cárcel por interrumpir voluntariamente su embarazo, que en el fondo es de lo que se trata cuando los lobbys fetofílicos presionan para que se aprueben más leyes, más legislaciones y más regulaciones. Ni hablar. De ninguna manera podemos aceptar eso. No hay que inmiscuirse en los embarazos de los demás. El Estado debe permanecer neutral.
ResponderEliminarZuppi, el presidente ZP ya respondió a esa cuestión y aclaró que él apoya la libertad de las mujeres para interrumpir voluntariamente su embarazo. Ellas y no el Estado o los lobbys fetofílicos deben decidir sobre su maternidad. Si una mujer no quiere tener un hijo subnormal yo lo respeto. Yo no le pediré que justifique su voluntad de interrumpir el embarazo. Me parecería una osadía por mi parte. ¿Quién soy yo para meterme en eso? ¿Quién es vuestro Estado de bienestar?
ResponderEliminarEfectívamente. Hay quienes justifican el aborto señalando los costes sociales de personas con Síndrome de Down,por ejemplo. Pero creo que los costes sociales de personas como ZP son incalculables.
ResponderEliminarVengo a visitarte recomendado por El Republicano Digital, estoy en la misma linea, soy defensor de la vida y no de la cultura de la muerte que tanto le gusta a ZP, la función (diría de circo, pero el circo es más respetable) que dio ayer es bochornosa ingignante e intolerable.
ResponderEliminarSaludos.
No necesariamente hay que encarcelar a la madre que aborta, necrófilo octopus. Podría aplicarse la pena al facultativo, que es quien realmente se enriquece con el acto, al tiempo que se incentiva la natalidad con ayudas y se promueve la adopción.
ResponderEliminarVer cómo la izquierda se empeña en defender posturas liberales (la "neutralidad" del Estado) y desecha aquellas destinadas a promover el bienestar social -sólo porque agradan a colectivos religiosos y ofenden a la ideología feminista- es algo que me provoca náuseas. La historia os pasará factura y sentiréis la vergüenza en carne viva.
Si el aborto es delito, entonces habrá que considerar que la madres es culpable, ya que es la primera responsable. Que yo sepa, ningún médico va secuestrando ni forzando a mujeres embarazadas a abortar. Es una decisión que ellas toman. Por lo tanto, que se atengan a las consecuencias. Si el aborto es delito, ellas son culpables.
ResponderEliminarLlamemos al pan pan y al vino vino.
Represor Irich, los extremos se tocan y constato cómo la derecha antiliberal arremete contra uno de los motores de la economía de mercado, que es el ánimo de lucro: si no podemos meter a las mujeres en la cárcel, que queda feo, metamos a los pérfidos médicos que se enriquecen. Este afán prehistórico de intromisión y supervisión es rechazado por la mayoría de la sociedad. Los médicos no han de quedar al margen y deben ejercer su profesión sin amenazas. La interrupción voluntaria del embarazo no puede dejarse en manos de fontaneros o electricistas. El cordón antisanitario coactivo con el que pretendéis imponer la maternidad a las mujeres es incompatible con un Estado democrático y liberal.
ResponderEliminarAnónima, el aborto no es delito en los supuestos que ya establece y ampliará la ley. Sí, llamemos al pan pan y al vino vino.