Vuelven las primarias estadounidenses. En Arizona y Utah para ambos partidos y en Idaho para los demócratas. Y con el aliciente por el lado republicano de que son las primeras después de la renuncia a continuar de Marco Rubio, quien además se resiste a apoyar a Ted Cruz (incomprensiblemente a mi parecer), ya que todos los rumores apuntaban a que lo iba a hacer poco después de su salida de la carrera, pero los días han ido pasando y llegan las siguientes primarias con su silencio.
Vamos con las encuestas. Por parte republicana en Arizona, donde recordemos que el vencedor se lleva todos los 58 delegados (que, dicho sea de paso, no son moco de pavo), dan una clara ventaja a Trump; mientras tanto en Utah (reparto proporcional de los 40 delegados) el claro favorito es Cruz. Y en el lado demócrata Hillary es clara favorita en Arizona, Sanders parte como favorito en Utah, y en Idaho hay un empate técnico entre los dos que está por verse a favor de quien se decide.
Veremos como quedan las cosas mañana a esta misma hora. Sea como fuere siguen siendo apasionantes.
Rubio es de lo peor, un peón de Rumsfeld que espera que ningún candidato llegue con mayoría a la convención para que le nominen a él por "dedo divino", jugándosela con Kasich, pensando que los mandamases del GOP no quieren obviamente a Trump pero tampoco a Cruz..
ResponderEliminarA ver qué pasa...
Hombre, no creo que la cosa sea así, sobre todo ahora que Rubio ha dejado la carrera. De ser como dices hubiera seguido adelante.
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