Un discurso totalmente light (y perdón por el anglicismo) es el adjetivo que me merecen las palabras de Zapatero.
Un discurso pulcro, políticamente correcto, modosito... y tibio, para no ofender a los terroristas islamistas.
El centro del pensamiento para mí es este párrafo:
La unidad de los demócratas, la acción eficaz de las fuerzas de policía, los servicios de inteligencia y los sistemas judiciales y la cooperación internacional son los mejores instrumentos para conseguir la derrota total del terrorismo.
Totalmente medido, probablemente hasta en las comas. Sobre todo para implícitamente descalificar la opción de atacar a los países que apoyan el terrorismo, lo que comúnmente llamamos una palabra que Zapatero evitó pronunciar en todo el discurso: Guerra.
Una guerra a la que, sin mencionarlo, él hace referencia. La guerra de Iraq. Como diciendo implícitamente: ¿Veis? La guerra de Iraq no fue la solución. Primero Madrid y ahora Londres demuestran que yo tenía la razón. Os habéis equivocado.
Una guerra que los fanáticos islamistas han declarado a la civilización occidental, debido a los valores que tenemos (principalmente la libertad y la democracia), y en la que Zapatero no quiere entrar. O al menos si entra, como en Afganistán, que no se note mucho.
Una guerra que el terrorismo islamista está trayendo al corazón de los países civilizados, y la que Zapatero no quiere hacer frente, sino que pretende hacer concesiones.
Tony Blair tomará nota de lo que Zapatero ha dicho, y de lo que no ha dicho. Porque Zapatero sigue siendo el mismo que cobardemente cedió a las demandas de los terroristas islámicos, y retiró las tropas españolas de Iraq en forma de deserción, cuando las pudo haber mantenido bajo cobertura de la ONU. Miedo, entrega.
Que diferencia con las palabras de George Bush:
La guerra contra el terrorismo continúa. Estoy muy impresionado por la determinación de todos los líderes en el salón. Su determinación es tan firme como mi determinación. Y no nos rendiremos a esta gente, no nos rendiremos a los terroristas. Los encontraremos, los llevaremos ante la justicia, y al mismo tiempo, diseminaremos una ideología de esperanza y compasión que aplastará su ideología de odio.
Se agradece la claridad.
Porque cuando hablamos de palabras como valores, democracia, libertad, fuerza moral, etc., todos estamos de acuerdo. El problema viene cuando hacemos una pregunta:
¿Vamos a buscar a los asesinos, a los que han atacado nuestros valores, nuestra democracia, nuestra libertad, nuestra fuerza moral, allí donde están y con la totalidad de los medios de los que disponemos? ¿Sí o no?
Bush diría: Sí. Totalmente claro y decidido.
Zapatero diría: No. Absolutamente débil y entregado.
¿Por que no dice ahora nada sobre que UK deberia retirar las tropas de Iraq porque es una guerra ilegal?
ResponderEliminar¿Nadie de Prisa dice eso ahora?
Tienen la cara de hormigon y nadie (bueno yo si) parece que se acuerda de eso ahora.
Parafraseando al ZP de hace dos semanas habria que decir que negociaremos con Bin Laden si deja las armas y que la solucion no puede ser solo policial.
ResponderEliminarLO bueno seria que como respuesta, Blair enviara aun más tropas a Iraq.
ResponderEliminarA algunos se os olvida (y supongo que no por casualidad) que la retirada de las tropas de España en Iraq fue con motivo del cambio de gobierno y no de los atentados como bien os esforzáis en dar a entender. El anuncio de que se iban a retirar fue semanas antes. Lo que pasa es que supongo que la derecha esperaba que, después del atentado, podrían chantajear al gobierno diciéndole que si las retiraba iba a ser un gesto que animara a los terroristas. Afortunadamente se os adelantaron.
ResponderEliminarPor cierto: no existe una guerra, es terrorismo. Entrar en el juego de los terroristas, que matan a decenas o cientos (incluso miles) de personas al azar, diciendo que eso es una guerra contra occidente, no se puede atacar militarmente un país (o toda una región como pretende EUA) matando a ciudadanos inocentes.
Al final va a resultar que, en el fondo, no tenéis ideas tan diferentes a los que tienen los terroristas (aunque evidentemente el comportamiento de unos y otros no es comparable, eso no lo pongo en duda).