Cabe la posibilidad de que, si la criatura que esperan Letizia y Felipe es niña, estemos ante una legislatura que dure poco más de dos años. Es decir, que hablamos de un país, España, donde el sexo del aspirante al trono puede marcar, y de forma importante, los tiempos políticos. Increíble, pero cierto.
Vamos por partes.
Ya comenté, aunque un poco de pasada, estás declaraciones de la Vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega:
Esperemos que los Príncipes tengan una niña y otra niña, o tengan un niño y una niña o tengan sólo una niña para evitar problemas.
¿Evitar problemas? ¿Qué problemas? O mejor dicho, ¿cuál sería el problema? Pues sería la opción que Fernández de la Vega no menciona, y es que primero naciera una niña y después un niño. Y la pregunta persiste: ¿Cuál sería el problema en ese caso? Pues que hay gente que sostiene que en ese caso sería el varón quien heredaría el trono, ya que no se podría aplicar con carácter retroactivo:
Evidentemente habría que reformar la Constitución, salvo que se quiera hacer que prevalezca la discriminación, pero ¿tendría efecto con carácter retroactivo para que esa niña ocupara un día el trono de España? Catedráticos de Derecho Constitucional como Jorge de Esteban sostienen que no.
Bien es cierto que hay constitucionalistas que mantienen lo contrario, como Francisco Rubio Llorente, presidente del Consejo de Estado:
No creo que sea necesario en absoluto adelantar nada", insistió el presidente del Consejo de Estado, quien consideró que los cambios en la Constitución para permitir el acceso de la mujer a la Corona se le aplicarían al heredero "aunque fuera niña y naciese antes de que la reforma se efectuase".
¿Quién tiene la razón? No lo sé. Y la cuestión es que, de plantearse un problema sucesorio, ninguno de los que opinan ahora estará en la política o en la judicatura para resolverlo cuando se presente. Porque las irónicas palabras de Ignacio Escolar en ese sentido están cargadas de razón:
Imagínense un juicio, en el 2030, entre dos hermanos -la niña y el niño- para ver quién hereda el cortijo.
Con lo que, sumado todo lo anterior, tenemos que si Letizia y Felipe tuvieran primero una niña y después un niño, y posteriormente se hiciese la reforma constitucional respecto al asunto, estaríamos ante la posibilidad de que, dentro de unos años (si es que para entonces pervive aún la monarquía española, que espero que no) se presentase un problema en la sucesión de una enorme envergadura, que, con toda probabilidad, de haber llegado hasta ahí la monarquía, la haría caer.
¿Van a correr ese riesgo Felipe y, sobre todo, Juan Carlos? Porque Juan Carlos a nivel de hacer sobrevivir la monarquía es un lince, y ya lo ha demostrado adaptándose a todas las circunstancias políticas (Franco, Transición, Democracia, Suárez, González, Aznar, Zapatero, y la última cuando prescindió de la bandera española en la boda del hijo).
Por lo tanto, dudo mucho que Juan Carlos quiera correr ese riesgo, por más que el problema no se vaya a presentar en vida de él.
Y entonces, ¿por qué este tipo de declaraciones?:
Felipe de Borbón ha afirmado que "no hay urgencia" ya que aún "hay otra generación por medio. El Rey recuerda que el heredero es el padre y dice que "ya era hora" de que Letizia se quedase embarazada.
Supongo que porque "en la Zarzuela" (o sea, Juan Carlos y Felipe) quieren esperar a saber el sexo de la criatura que viene en camino antes de empezar a hacer los movimientos pertinentes. Movimientos que, de ser niño, se harían totalmente innecesarios, porque con reforma o sin ella sería el heredero. Pero que, se ser niña, supongo que Juan Carlos ejercería todas las presiones posibles sobre el Gobierno para adelantar la reforma constitucional, para no arriesgarse a un segundo embarazo con resultado de niño sin estabilizar el tema, que complicaría las cosas en el sentido ya señalado.
Y tenemos que recordar que la reforma constitucional de la que estamos hablando va por el siguiente sistema:
Artículo 168
1. Cuando se propusiere la revisión total de la Constitución o una parcial que afecte al Titulo preliminar, al Capítulo segundo, Sección primera del Título I, o al Título II, se procederá a la aprobación del principio por mayoría de dos tercios de cada Cámara, y a la disolución inmediata de las Cortes.
2. Las Cámaras elegidas deberán ratificar la decisión y proceder al estudio del nuevo texto constitucional, que deberá ser aprobado por mayoría de dos tercios de ambas Cámaras.
3. Aprobada la reforma por las Cortes Generales, será sometida a referéndum para su ratificación.
Que implica que, una vez aprobada la reforma por el Congreso y el Senado, hay que disolver inmediatamente las Cortes.
Por ello preveo que la duración de la actual legislatura puede estar determinada por el sexo de la criatura que porta Letizia. Si es niño, las cosas seguirán su curso. Pero si es niña creo que existe la posibilidad de que esta legislatura quede acortada drásticamente. Y si fuera así, estamos en un país donde la vida política la marca el sexo de la primera criatura del príncipe (lo que, de hecho, ya está sucediendo). Así es la monarquía. Así es España. ¿Algún día cambiará? Espero que sí.
¿Tu crees qeu no han elegido el sexo de la criatura en la clinica de fertilidad?
ResponderEliminarSi es niña,antes del referendum ¿Habra abdicacion a favor de Felipe?(Para evitar dudas sobre retroactividad en favor de Elena)
ResponderEliminarEn un insulto diario a Elena el hecho de que se hablen d elos derechos de su sobrina obviandose los suyos. Un insulto, y una ignominia.
ResponderEliminarYo estoy de acuerdo con el anónimo, no creo que hayan dejado al azar lo único para que lo que la monarquía está, es decir, perpetuarse con la mayor seguridad, para ellos ¿claro?
ResponderEliminardicen que quieren igualdad
ResponderEliminarque hay discriminación
¿porque el hombre vale más que una mujer?
pero no dicen:
¿porque vale más el primero que el segundo?
porque no hay respueta.
El que quiera algo, que se lo gane, viva la igualdad,
¡ viva la Republica¡.